Nadal se cita con la historia

El catálogo de las finales de Grand Slam se abre en 2022 con un plato que, superando las mayores expectativas, puede hacer temblar la historia del tenis. El Open de Australia llega a su último día de competición en una de las ediciones más rocambolescas que se recuerdan con un duelo entre Daniil Medvedev y un Rafael Nadal que, de conquistar su grande ‘maldito’, se convertirá en el mejor tenista de la historia, números en la mano.

El sueño de los 21 Grand Slam está más cerca que nunca de hacerse realidad y hará madrugar a España, donde a partir de las 9:30 horas se podrá ver un duelo de estilos contrapuestos y tenis mayúsculo, un combate generacional en el que el adalid del fair play en el circuito ATP se mide al villano favorito de muchos. Un Nadal vs Medvedev en el que se esperan emociones fuertes, con el ejemplo de lo sucedido en el US Open 2019 aún presente y un sueño cumplido al término del choque mientras el del rival se convierte en pesadilla.

Nadal llega a la gran final en Melbourne Park después de autodescartarse días antes del comienzo del torneo. El manacorense llegaba con escaso rodaje después de más de cinco meses de ausencia por una lesión crónica que amenazó con no volver a dejar jugar al mejor deportista español de todos los tiempos. La ilógica, sin embargo, se iría imponiendo como en tantas ocasiones cuando Rafa es el protagonista del cuento y Giron, Hanfmann, Khachanov, Mannarino, Shapovalov y Berrettini compondrían el elenco de víctimas de Rafael Nadal Parera a la llegada a la que es su sexta final en el Open de Australia.

La de Rafa es la historia de superación de un superhéroe que ganó su primer Grand Slam el 5 de junio de 2005 y quiere, 17 años después, conquistar el que le coloque en lo más alto de la clasificación histórica, superando ni más ni menos que a Roger Federer y Novak Djokovic. Y todo ello con 35 años, la inactividad explicada anteriormente y la pujanza de las nuevas estrellas, gigantes pegadores que no han podido con la capacidad de mando, mentalidad y efectos del tenis de Nadal.

Medvedev, el rival más duro

El jefe de la nueva generación, Daniil Medvedev, llega al encuentro por el título por segunda vez en dos años, después de la final de 2021 en la que Djokovic le apartó de su sueño en tres sets. Ahora y ya como campeón de Grand Slam –lo logró vengándose de Nole en 2021– el ruso obtiene una nueva ocasión de triunfar en Australia, donde la pista se le adapta a las mil maravillas pero donde también ha encontrado altibajos que a punto estuvieron de costarle la eliminación en cuartos, ante Auger-Aliassime, e incluso en las semifinales contra Tsitsipas.

El público ya ha elegido bando y estará con Rafa, un ejemplo de valores más allá del tenis que contrasta con la fama de polémico que Medvedev ha elevado con su episodio, lamentable, con el juez de silla español Jaume Campistol en semifinales. Esos gritos y menosprecios del ruso le pondrán en contra al respetable en la Rod Laver Arena, por lo que el primer punto de la final por la historia está en el bolsillo de Nadal.

Los precedentes del combate final

En una final de tal nivel como la que se vivirá en Melbourne acostumbran a tomar importancia los precedentes entre ambos tenistas. Los vividos por Nadal y Medvedev en duelos directos no son múltiples, pero sí ricos para el análisis. Ambos contendientes se han medido en cuatro ocasiones, todas ellas en pista dura y en torneos de gran magnitud. El primer duelo fue el único desestabilizado, una paliza en toda regla (6-3, 6-0) de Rafa sobre Daniil en la final del Masters 1000 de Canadá 2019.

Después llegaría la recordada final del US Open, semanas después, en la que Nadal comenzó como un tiro pero a punto estuvo de ser remontado por un Medvedev que jugó como los ángeles pero murió en la orilla ante el último golpe (7-5, 6-3, 5-7, 4-6, 6-4) de la leyenda de Manacor. Dos actos en el Masters Finals, uno en el mismo 2019 con victoria apretadísima (6-7(3) 6-3 7-6(4)) de Rafa y otro en semifinales de 2020, con la primera victoria de Daniil (3-6, 7-6(3), 6-3) completan el head to head de una tarjeta que vivirá su episodio más especial en la Rod Laver Arena con la historia en juego.