Escándalo en Francia: apedrean el autobús del Lyon y Grosso llega sangrando al estadio del Marsella

Los episodios lamentables en Francia hace tiempo que se convirtieron en algo cotidiano. El último perjudicado por los radicales que ensucian el fútbol galo ha sido el mítico jugador de Italia y entrenador del Olympique de Lyon, Fabio Grosso. El autobús en el que tanto él como jugadores y miembros de su equipo estaban siendo trasladados fue apedreado en su llegada al Vélodrome, causando cortes en el rostro del italiano. El partido fue suspendido tras lo ocurrido.

Varias ventanas del autobús donde se encontraba la expedición se rompieron tras los lanzamientos de piedras por parte de un grupo de ultras del Marsella y el técnico italiano tuvo que ser atendido médicamente al bajar del vehículo con la cara ensangrentada. Finalmente, llegó al interior del estadio con una venda que cubría la gran parte de su cabeza.

🚨 Avant-match OM – OL : le bus de l’@OL a été caillassé, Fabio Grosso blessé est en train de se faire soigner.

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— Free Ligue 1 (@FreeLigue1) October 29, 2023

La piedra le golpeó en un ojo y es por eso que accedió al estadio tapándose la cara y sujetado por dos personas antes de ser observado y curado por los médicos. El partido de la jornada 10 de la Ligue 1 entre el Olympique de Marsella y el Olympique de Lyon estaba previsto para las 20:45 horas de este domingo, pero finalmente fue suspendido debido a este incidente sufrido por Grosso.

Desde RMC Sports apuntaron horas después a que Grosso recibió 12 puntos de sutura cerca de un ojo tras ser golpeado con una lata de cerveza en su llegada al Vélodrome.

Últimos sucesos en Francia

Lo más triste es que este episodio que ha sufrido Grosso en el autobús del Olympique de Lyon no ha sido el único que ha sacudido al fútbol francés en el último mes. Recientemente, un grupo de ultras del Montpellier lanzaron un petardo encendido desde la grada del Stade de la Mosson a la zona donde se encontraba el portero visitante del Clermont, Mory Diaw.

El objeto explotó justo a su lado y provocó que este se desplomase en el terreno de juego, teniendo que ser rápidamente retirado en camilla. El colegiado del encuentro, Florent Batta, tuvo que detener la contienda con 4-2 a favor de los locales. Los ultras se exponen a una dura sanción después de malograr a Diaw, quien estaba recibiendo un balón por parte de un recogepelotas en el momento de la explosión.

La reacción de uno de los jugadores del Clermont contra los ultras fue bastante dura. A Neto Borges, lateral izquierdo del cuadro visitante, hizo el gesto de una peineta apuntando al sector de la grada desde donde se lanzó el petardo en el estadio de Francia y le supuso una surrealista expulsión, mientras que su compañero era atendido por los servicios médicos.