EUROLIGA: ZALGIRIS 66 - REAL MADRID 87

Doncic lidera el rodillo madridista en Kaunas

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Luka Doncic penetra a canasta. (EFE)
Francisco Rabadán
  • Francisco Rabadán
  • Redactor jefe de deportes. He tenido la oportunidad de cubrir dos Juegos Olímpicos, varios Mundiales de distintas disciplinas y algún que otro All-Star de la NBA con los Gasol. De Córdoba y sin acento.

El Real Madrid se mantiene invicto en la Euroliga tras vencer en la complicada y candente cancha del Zalgiris Kaunas. Luka Doncic se volvió a vestir de MVP con una actuación sobresaliente consistente en 28 puntos, 9 rebotes y 4 asistencias para 35 de valoración. Los blancos superaron con facilidad a un rival que careció de talento ofensivo, pero que lo sustituyó con físico y deseo para plantar cara a los visitantes hasta casi el descanso.

Los pupilos de Laso aceleraron a pocos minutos del receso gracias a dos triples consecutivos de Facundo Campazzo. El base argentino impulsó un parcial de 2-13 favorable a los blancos después de que el Zalgiris liderara el partido por primera y única vez estableciendo el 26-25 mediado el segundo cuarto. Ese aviso espoleó al equipo blanco a vencer en una de las canchas más complicadas de Europa con un superlativo Doncic que sentenció el partido en el tercer periodo y que infló sus estadísticas en el periodo final para dejar el listón de MVP de la cuarta jornada muy alto, casi imposible para los mortales.

Y eso que el partido prometía un desenlace fácil a raíz de un parcial de 2-10 para los merengues. Unos cuantos gritos de Jasikevicius sirvió para que sus pupilos se enchufasen con la conexión formada por Pangos y Kavaliauskas. El base americano ponía el tiro y el estilo, el pívot lituano se fajaba en la zona y con su estilo peculiar lograba sumar punto tras punto.

El Zalgiris llevó el partido al aspecto físico y arrinconó a los visitantes en los primeros minutos del segundo cuarto. Hasta Doncic parecía no saber cómo encontrar el camino a la canasta. Y cuando peor estaban las cosas emergió la figura de Campazzo para cambiar la dinámica del partido con tiros abiertos y buena defensa.

El descanso dio más impulso a la idea de los blancos, mientras que los lituanos parecieron bajar los brazos. Doncic olió sangre y en un minuto de auténtica inspiración metió siete puntos que dieron la puntilla al duelo. Los blancos pudieron dosificar y jugar a placer el último periodo gracias a una ventaja que no bajó nunca de los 10 puntos. El Madrid vuela en Euroliga impulsado por un niño de 18 años. Histórico.

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