Cicinho y su alcoholismo durante su etapa en el Real Madrid: «Bebía 10 cervezas al día»
Cicinho ha confesado en la prensa brasileña sus problemas de alcoholismo durante 20 años. Ahora, con el problema ya superado gracias al apoyo de su mujer, quiere servir de motivación para que otros no caigan donde él cayó
El ex lateral brasileño Cícero Joao de Cézare, conocido como Cicinho, ex jugador de equipos como Real Madrid, Roma o Villarreal, entre otros, ha confesado en una columna del diario Estado de Sao Paulo que sufrió alcoholismo durante casi 20 años. Un problema que dice haber dejado ya atrás hace ocho, gracias al apoyo de la que hoy es su mujer. «Ella me animó a conocer los principios que tenía, que eran orientados a la palabra de Dios, y fue así que tuve mi transformación», confiesa.
«Comencé a beber con 13 para 14 años, cuando fui para el Botafogo de Ribeirao Preto. Me dijeron que la cerveza era buena y bebí. Todo comenzó con el primer trago y no paré hasta los 30 años. Casi 20 años bebiendo», confiesa Cicinho en una columna en la prensa brasileña. El lateral aterrizó en el fútbol europeo en 2005 para unirse al Real Madrid, aunque apenas un año y medio después se marchó a la Roma.
Cicinho comenzó con la cerveza porque «no tenía dinero», pero después «pasó a beber de todo». «Y cigarro. Fumé durante 11 años, de 1999 a 2010. Solo fumaba cuando bebía, pero mira que bebía…. Todo el día», confiesa. Sin embargo, todo cambió cuando conoció a su mujer. «Ella me animó a conocer los principios que tenía, que eran orientados a la palabra de Dios, y fue así que tuve mi transformación», relata.
Quiere ayudar con su experiencia
Cicinho colgó las botas en 2018 tras varias lesiones en la rodilla. Aunque ha tenido alguna oferta sobre la mesa para seguir jugando, el brasileño ha decidido que esa etapa de futbolista concluyó y que ahora lo que quiere es concienciar a los jóvenes sobre su problema y servir de ejemplo.
«El fútbol fue una fase en mi vida. Ahora mi fase es mostrar mi testimonio y ayudar a las personas para que no caigan en el camino donde yo caí. Doy conferencias de motivación. No estoy en condiciones para jugar, mi mente es de ex futbolista, mi cuerpo ya está acostumbrado», dice.
Un Cicinho transformado, que dejó atrás sus problemas de alcoholismo y que quiere servir de inspiración a otros para que no caigan en lo mismo. «Hace ocho años que no tengo problemas con el alcohol y el cigarro. No traiciono a mi mujer, vivo los principios que Dios me pide. Espero que las personas lo miren por el lado del auxilio porque es triste ver a grandes jugadores del fútbol brasileño y mundial con el poder de influir por el lado bueno, y que lo hacen por el lado malo», concluye.