Bombazo en el Mundial: Francia se carga a Estados Unidos en cuartos
La selección francesa se impuso contra todo pronóstico a Estados Unidos (79-89) en cuartos de final del Mundial, despidiendo a la gran favorita al triunfo final. El cortocircuito norteamericano provocó una eliminación prematura y un fracaso para muchos previsto, aunque no de esta forma.
La selección francesa se impuso contra todo pronóstico a Estados Unidos (79-89) en cuartos de final del Mundial, despidiendo a la gran favorita al triunfo final. El cortocircuito norteamericano provocó una eliminación prematura y un fracaso para muchos previsto, aunque no de esta forma. Las carencias de Estados Unidos en el ataque estático salieron a la luz con la defensa de Francia, basada en una zona que causó estragos por momentos ante la incapacidad de los directores de juego norteamericanos. Además, el poderío contrastado del mejor defensor de la NBA, Rudy Gobert, marcó la diferencia en ambos aros para consumar el gran bombazo de lo que llevamos de Mundial.
Francia estaba lista para competir de tú a tú con Estados Unidos y lo demostró desde el primer minuto. Con tres piezas destacadas en el roster, el combinado dirigido por Vincent Collet no dejó que los grandes favoritos al título se despegaran en el marcador en ningún momento. Desconectando a Kemba Walker, Donovan Mitchell fue el encargado de llevar las riendas del ataque de la selección americana, pero sus mostruosas estadísticas no encontraron respuesta en los minutos clave de encuentro, donde el verdadero coloso fue Rudy Gobert.
Los 218 centímetros de altura y 234 de envergadura del pivot de Utah Jazz se sumaron a un compromiso sin parangón para guiar a la victoria a su equipo. Francia se sostenía en defensa gracias a los tapones de Gobert, que empequeñeció a dos estrellas de la NBA como Walker y Mitchell en los últimos minutos con sendas chapas de órdago. El resto, que no es poco, fue correr y colaborar con las dos estrellas ofensivas de la fase final de choque: Nando de Colo y Frank Ntilikina.
El base de New York Knicks sucedió en galones a un Fournier que se quedó sin gasolina tras tres cuartos de auténtico crack y con su dirección y anotación ejerció de elemento sorpresa ante una Estados Unidos en modo suicida en ataque, recurriendo sólo al 1 vs 1 y sin pivots que cargaran el rebote ofensivo ante Gobert. De Colo, excelso como siempre desde la línea de tiros libres, puso la experiencia que le faltó a EEUU para seguir vivo en un Mundial que no verá a su último campeón repetir corona.