Adiós confirmado a los sobres de kétchup: ya hay fecha para su desaparición
Los sobres de kétchup desaparecerán a partir de 2030 por orden de la Unión Europea
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Los sobres de kétchup desaparecerán a partir de 2030. Una normativa de la Unión Europea prohibirá a partir de esta fecha la venta y uso de estos envases con el objetivo de reducir el consumo de plástico y envases de un solo uso que se realiza a diario. Todo ello después de que antes del verano el Parlamento Europeo confirmara una serie de cambios que cambiará la forma de consumo tal y como lo conocemos hasta ahora. El Reglamento, que busca hacer frente al constante aumento de los residuos, armonizar las normas del mercado interior e impulsar la economía circular, se aprobó con 476 votos a favor, 129 en contra y 24 abstenciones.
Europa se dirige en los próximos años a un proceso de cambio en lo que se refiere a la concienciación medioambiental que se va a ir reflejando en las distintas leyes que se irán sucediendo en los próximos tiempos. Aunque esto suponga un coste para los ciudadanos de los estados miembros, desde el Parlamento Europeo parece que va a imponer con la mano de hierro todo lo relativo a lo verde. Las primeras víctimas de ello serán los sobres de kétchup y demás envases de uso diario que desaparecerán tal y como los conocemos en 2030.
A finales de abril del 2024, los países miembros de la Unión Europea votaron a favor de eliminar este tipo de envases de usar y tirar con el objetivo de reducir la cantidad de envases y productos de plástico que se realiza en el viejo continente en el día a día. Así que de esta manera no sólo desparecerán los sobres de kétchup, si no que también estará prohibida la venta y uso del os sobres de azúcar o incluso los envases de aseo personal de menor tamaño que se utilizar para poder viajar en los aviones, por ejemplo.
Esta ley hará que a partir de 2030 restaurantes, hoteles y demás establecimientos tengan prohibido poner a disposición de los clientes productos de usar y tirar. La idea de los representantes políticos es que cada ciudadano lleve consigo estos recipientes. Hay que recordar que en el pasado año 2021 ya se prohibió el uso de ciertos plásticos desechables, como platos, cubiertos, o las tradicionales pajitas, que fueron sustituidas por cañas de cartón en los establecimientos que ofrecen comida rápida.
«La ley fija objetivos específicos de reutilización para 2030 para los envases de bebidas alcohólicas y no alcohólicas (excepto, por ejemplo, leche, vino, vino aromatizado, licores), los envases para transporte y venta, así como los envases colectivos (que incluyen varios productos)», informó la Unión Europea.
Adiós a los sobres de kétchup y de azúcar
Tal y como sucedió con las pajitas de plástico, a partir del año 2030 desaparecerán los sobres de kétchup, azúcar y demás productos de aseo personal que no tengan un tamaño considerable. «Algunos tipos de envases de plástico de un solo uso quedarán prohibidos a partir del 1 de enero de 2030. Entre ellos figuran los envases de frutas y verduras frescas sin procesar, los de alimentos y bebidas que se sirven y consumen en cafeterías y restaurantes, los de porciones individuales (para, por ejemplo, condimentos, salsas, crema, azúcar), los envases pequeños de productos de higiene personal y las bolsas de plástico muy ligeras (de menos de quince micras)», indicó la Unión Europea en su página web.
El Parlamento Europeo ha apoyado esta decisión, que supone otra prohibición para los ciudadanos, en unos informes proporcionados por Eurostat que resaltan que entre 2009 y 2010 la cantidad de envases diarios que se utilizan aumentó en un 20%. Al parecer, en 2021 se generaron 84 de toneladas de basura en lo que respecta a los envases y un 20% eran de plástico, un material que según la Unión Europea acaba contaminando el océano y empeoran la crisis ambiental. Como informa este organismo, sólo una persona genera 180 kilos de envases al año y con la nueva normativa se pretende reducir hasta un 15% hasta el 2040. Todo gracias a unas medidas radicales que cambiarán de un año para otro la forma de consumo tal y como la conocemos en la Unión Europea.
Ahora, según las nuevas normas que propone la Unión Europea, «todos los envases (excepto los de madera ligera, corcho, textil, caucho, cerámica, porcelana y cera) tendrán que ser reciclables cumpliendo unos criterios estrictos».