El PSOE de Ximo Puig pide a los valencianos aplastados por los impuestos que financien su campaña
El PSPV-PSOE, el partido por el que el presidente valenciano Ximo Puig concurre a las elecciones, ha decidido recurrir a una línea de financiación a base microcréditos ciudadanos para financiar su campaña electoral. Esos microcréditos van de los 200 a los 10.000 €. Y con ellos los socialistas valencianos esperan lograr en torno a los 300.000 €, que a su vez, devolverán con un interés de un 3%.
Se da la circunstancia de que el PSOE, que conforma el actual gobierno autonómico valenciano con Compromís y Podemos, ha aprobado junto a estos mismos socios de legislatura una serie de iniciativas que incluían más impuestos y tasas en este territorio.
Entre ellos, la tasa turística, que entrará en vigor en territorio valenciano en 2024, o los que comprende la Ley de Cambio Climático y Transición Ecológica de la Comunidad Valenciana. Y ha rechazado, a la vez, rebajar o suprimir impuestos como el de sucesiones, el que el líder del PP Carlos Mazón ha denominado como impuesto a la muerte y con el que los populares han anunciado que acabarán si alcanzan el gobierno autonómico.
Los socialistas justifican su decisión para fomentar la participación en campañas electorales y rebajar la dependencia de las entidades financieras. De facto, no pedir créditos a los bancos, sino microcréditos a los ciudadanos.
De hecho, la campaña de microcréditos abre este viernes la página del PSPV-PSOE. Encabezada por el lema de campaña de Ximo Puig: ElPresidente. Incluye a continuación la palabra Microcréditos. Y, a esta, le sigue el mensaje: Colabora en nuestra campaña electoral. Contamos contigo. Finalmente, un recuadro rojo enmarca la palabra Participa.
La campaña socialista ha trascendido en paralelo a que su gran rival electoral, el PP de Carlos Mazón, avanzara en la localidad valenciana de Meliana su proyecto de gobierno para la Comunidad Valenciana.
Ximo Puig sí aprobó una reforma fiscal de 150 millones de € en esta legislatura, pero muy inferior a la que propugnaba el PP de Carlos Mazón, que planteaba una bajada de impuestos entonces de 1.500 millones de € para todos los valencianos.