La genética española da un vuelco: nuestro ADN no viene de donde creíamos
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Nuestro ADN no viene de donde creíamos, un estudio de la Universidad de Granada nos descubre que tenemos más en común de lo que pensábamos con los noruegos. El ADN es ese libro de instrucciones que determina todo nuestro ser. Su descubrimiento cambió por completo determinadas investigaciones, pero también se convirtió en una fuente de datos que nos llevaba hasta el origen de la humanidad. Podemos saber con exactitud de dónde venimos y los elementos que compartimos con esas poblaciones que durante siglos han habitado la tierra.
En España hemos sido cuna de culturas y de civilizaciones que se han ido expandiendo por el territorio. Somos una tierra que acoge a otras personas que han llegado desde lejos y que acabarán convirtiéndose en uno de los que nos hace estar pendientes de todo lo que sucede a nuestro alrededor. Por lo que, quizás este reciente estudio nos acabe dando más datos sobre lo que somos y éramos en el pasado, esta mezcla de elementos que llega para quedarse y que se va enriqueciendo a medida que pasa el tiempo y descubrimos otros elementos que hasta la fecha no habíamos imaginado.
Da un vuelco la genética española
Ha llegado el momento de empezar a prepararnos para lo que está por llegar y lo que podemos encontrarnos en estos días que tenemos por delante. Nuestro ADN es una carta que nos hace describir no sólo nuestro propio cuerpo, sino los que nos han precedido en esos genes que están presentes, pero no vemos.
Los españoles poseemos una riqueza genética más grande de lo que nos imaginamos. Somos la puerta de entrada a Europa y eso quiere decir que tendremos que estar pendientes de algunos elementos que quizás hasta ahora no habíamos tenido en cuenta. Por lo que, habrá llegado el momento de poner en práctica algunos elementos claves.
Nuestros investigadores no han dudado en conocer en primera persona qué es lo que podemos afrontar, de la mano de algunos detalles que son fundamentales y que quizás hasta ahora no habíamos ni imaginado. Tocará saber en todo momento qué tenemos por delante y cómo afrontarlo.
Es el momento de saber qué tiene escondida esta genética española que quizás acabe dándonos señales de cambios, más de la que nos imaginaríamos. Es hora de apostar claramente por esos detalles que quizás hasta ahora no habíamos ni imaginado.
Nuestro ADN no viene de donde creíamos
La Universidad de Granada nos ha revelado que tenemos un ADN que proviene de una parte del mundo que quizás no esperaríamos. Pese a la proximidad con África y los vínculos históricos que hemos tenido, nos enfrentamos a una serie de revelaciones que ponen los pelos de punta.
Siguiendo un artículo de esta citada Universidad: «Sin ‘Memorias de África’: un estudio genético revela que la población del Sur de la Península Ibérica apenas tiene ADN africano».
Una afirmación que se explica: «Investigadores de la Universidad de Granada (UGR), pertenecientes al Laboratorio de Identificación Genética, han descubierto que el ADN del cromosoma Y de las poblaciones del sur de la Península Ibérica (Granada, Málaga y Almería) tiene un componente muy bajo de ADN del norte de África, similar al que existe en otros lugares de España y de otros países del Mediterráneo. Estos resultados, publicados en la prestigiosa Scientific Reports (del grupo Nature), revelan que, pese a que los árabes ocuparon la Península Ibérica durante más de 800 años, no dejaron más legado genético en estas provincias españolas que en otras zonas donde estuvieron mucho menos tiempo. Se trata de la primera vez que se publica un estudio específico de estas tres poblaciones (provincias) españolas sobre marcadores genéticos del cromosoma Y, y se compara con el resto de España y de Europa y del norte de África. Los investigadores advierten del fuerte contraste que existe entre la herencia genética que dejaron los árabes en la Península Ibérica, que ahora se demuestra escasa, con la enorme herencia cultural, si repasamos el gran legado andalusí».
Siguiendo con la misma explicación: «Las similitudes entre la población de Granada, Málaga y Almería y la población europea, o más concretamente otras poblaciones españolas, hace que las posibles diferencias existentes sean muy difíciles de identificar, a pesar de que el cromosoma Y es uno de los cromosomas más pequeños del genoma humano, con un tamaño de unos 60Mb (millones de bases), y se hereda de forma directa de padres a hijos. Mediante la caracterización genética de variaciones en el cromosoma Y humano, se puede conseguir construir una herramienta que ayude a comprender la contribución genética de estas variaciones y su evolución. Esta información puede aplicarse a distintas áreas de la ciencia, como son la Antropología, la Medicina Forense y otras muchas en la Biomedicina. En el estudio realizado en la UGR se han caracterizado genéticamente individuos varones de las poblaciones de Granada, Málaga y Almería para determinar el posible legado genético de las poblaciones que formaron el antiguo Reino de Granada presente en las poblaciones actuales. “Nuestros resultados revelan que ningún componente africano ha permanecido en la población del Sur de la Península Ibérica, a pesar de haber estado ocupada por éstos durante 800 años -señala Saiz-. La presencia de haplogrupos típicamente africanos en la población de Granada, Málaga y Almería no es significativa cuando se compara con las frecuencias de éstos en poblaciones europeas, tanto mediterráneas como del norte de Europa».