La exploración de nuevas fuentes de energía: Hidrógeno verde en España

España es pionera en la exploración de nuevas fuentes de energía y esto incluye la adopción del hidrógeno verde. Este combustible es una alternativa limpia para la generación de energía y está posicionando al país como líder en la transición energética de Europa.

Para nadie es un secreto que el mundo se encuentra en constante búsqueda de nuevas fuentes de energía, que sean sostenibles y respetuosas con el medio ambiente. En ese contexto, el hidrógeno verde representa una opción prometedora y España ha dado importantes pasos para incorporarlo.

El hidrógeno verde

El hidrógeno verde es un compuesto que se obtiene a partir de un proceso llamado electrólisis. Este permite separar las moléculas del agua, en oxígeno e hidrógeno. Para llevar a cabo el procedimiento se emplea electricidad. Esta proviene de fuentes renovables, como la energía solar o la eólica.

Este tipo de principio activo verde tiene una huella de carbono prácticamente nula. Puede ser utilizado como combustible o como materia prima para la producción de otros combustibles sintéticos. Esto lo convierte en un elemento con grandes potenciales para adelantar la transición energética.

España busca consolidarse como un referente en la producción de hidrógeno verde. El país cuenta con un firme compromiso frente a las energías renovables. Además, esta nueva fuente de energía ofrece grandes perspectivas para la economía y el desarrollo de España.

España y el hidrógeno verde

España proyecta convertirse en líder dentro del mercado del hidrógeno verde. Para respaldar ese objetivo, la Unión Europea aprobó una ayuda estatal de 1.200 millones de euros para impulsar esta industria en el país. Tal ayuda está destinada al desarrollo de instalaciones de producción de hidrógeno verde con una capacidad igual o superior a 100 megavatios.

Uno de los objetivos centrales es promover la creación de “valles de hidrógeno” en diversas zonas del país. Allí deben concentrarse los proyectos de producción y consumo de hidrógeno verde.

España tiene grandes ventajas estratégicas que favorecen su objetivo de convertirse en líder en materia de producción de hidrógeno verde. Cuenta con abundantes recursos solares y eólicos. Así mismo, tiene una infraestructura de energías renovables bien desarrollada.

A lo anterior se suma que el país ha hecho grandes inversiones de recursos en proyectos de energía solar y eólica, durante los últimos años. Este es un factor que reduce los costos de producción del hidrógeno verde y hace viable su producción como alternativa energética.

Ventajas competitivas

La hoja de ruta de España en materia energética es un plan conocido como “Visión 2030”. Fue presentado por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico. Su principal meta es alcanzar una capacidad instalada de electrolizadores de 4 GW para el año 2030. Esto requiere una inversión estimada de 8.900 millones de euros en la década 2020-2030.

Este respaldo institucional, unido al apoyo de la UE, aporta un plus de seguridad y estabilidad a las inversiones en el sector del hidrógeno verde. Esto, por supuesto, atrae a empresas y capital tanto nacionales como internacionales.

De hecho, a finales de 2022, España ya había captado uno de cada cinco proyectos de hidrógeno verde a nivel mundial. No podría ser de otra manera, si se toma en cuenta que el país resulta ideal para la exportación de este tipo de hidrógeno, especialmente hacia el norte de Europa, donde la demanda de energías limpias está en constante aumento.

Un renglón con mucho futuro

La producción de hidrógeno verde no solo puede afianzar el liderazgo de España en materia de energías limpias, sino que también va a tener un impacto muy positivo a nivel interno.

El hidrógeno verde seguramente va a ser utilizado para alimentar los sistemas de transporte público. Así mismo, se puede incorporar en diversos procesos industriales. De este modo, el país no solo está incursionando en un mercado con gran futuro, sino que puede mejorar la salud y la calidad de vida de sus ciudadanos.

Beneficios Ambientales y Económicos

La adopción del hidrógeno verde no solo contribuirá a la reducción de emisiones de CO2, sino que también tiene el potencial de generar empleo y fomentar el desarrollo económico en regiones que implementen estas tecnologías. Además, el hidrógeno puede ser utilizado en sectores difíciles de descarbonizar, como el transporte pesado, la industria química y la producción de acero, lo que lo convierte en un elemento clave para lograr los objetivos climáticos de España y de la Unión Europea.

Desafíos a Superar

A pesar de su prometedor futuro, el desarrollo del hidrógeno verde en España enfrenta varios desafíos. Entre ellos, se encuentran la necesidad de inversiones significativas en infraestructura, la creación de un marco regulatorio claro y la formación de una cadena de suministro eficiente. Asimismo, es esencial fomentar la colaboración entre el sector público y privado para impulsar la investigación y la innovación en esta área.

Conclusión

La transición hacia un modelo energético basado en el hidrógeno verde no solo es posible, sino que es esencial para lograr un planeta más saludable y un futuro próspero para las próximas generaciones.

Lecturas recomendadas

España como hub del hidrógeno verde

Hoja de ruta del hidrógeno renovable