Problemas de visión en los niños: 12 signos de alarma
Descubre algunas de las señales o signos de alarma en el bebé, que suelen advertir de que tal vez existen problemas de visión en el niño.
Una de las primeras cosas que preocupa a los padres sobre el estado de salud del recién nacido es saber si ve bien o si va a tener algún problema ocular. Durante las primeras semanas de vida, el bebé suele ver sombras o imágenes borrosas, pero a poco y a medida que su vista se desarrolla, podemos fijarnos en algunos signos o señales de alarma, que sirvan para identificar si existen problemas de visión en el niño.
Aunque sabemos que la vista es el últimos de lo sentidos que desarrollan los niños tras nacer, a medida que avancen las semanas de vida, observaremos de qué modo, el bebé abre cada vez más los ojos, como intenta coger o tocar cosas que mira y también, desaparece el estrabismo que sufre los primeros días dado que no controla completamente el nervio óptico.
Problemas de visión en los niños: 12 signos de alarma
Hemos de pensar que durante los nueve meses del bebé en el vientre materno, tan solo ha percibido parte de la luz que se filtra, de modo que al nacer, deben pasar semanas para que vea o distinga los objetos y caras cerca de él.
Sin embargo, existen algunos signos o señales de alarma que tienen que ver con los problemas de visión en los niños. Son señales que los padres deben vigilar o comprobar y que, sumado a los controles que haga el pediatra, pueden servir para diagnosticar a tiempo cualquier problema de visión y más cuando previamente, ya existen o han existido alguna patología familiar.
De este modo, podemos diferenciar 12 signos de alarma que vigilar en nuestro bebé, y que debemos observar tanto durante los tres primeros meses de vida como a partir del cuarto mes. Son los siguientes:
Los 3 primeros meses:
- Observamos que un ojo se mueve de manera diferente al otro
- El bebé solo abre un ojo
- Observamos manchas blanquecinas o amarillentas en la pupila del bebé
- Uno o los dos ojos se muestran siempre hinchados
- El recién nacido muestra signos de sensibilidad extrema a la luz
- Después del 1er mes, el bebé no está interesado en mover objetos, luces y colores.
- Uno o los dos ojos tienen los párpados caídos.
- El niño parpadea frecuentemente o se frota los ojos constantemente, incluso cuando no tiene sueño.
- Un ojo o una pupila es más grande que el otro
A partir del 4º mes:
- El niño es incapaz de seguir con sus ojos ni el ruido de un sonajero o los juguetes que le mostramos.
- Los ojos del bebé parecen balancearse de un lado a otro
- El niño tiende a inclinar la cabeza hacia adelante cada vez que enfoca su mirada en un objeto.
Cualquiera de estos signos ya supone una señal de alarma para los padres, de modo que deberán ponerse en contacto con el pediatra, para que este evalúe al bebé y recomienda pruebas adicionales que sean más específicas.
Temas:
- Cuidados del bebé