Consejos para evitar que los niños sufran un golpe de calor

En los últimos días nos encontramos soportando unas temperaturas que nada tienen que ver con la primavera, ya que son propias de los meses de julio y agosto. Por ese motivo, hay que prestarle especial atención a los niños, ya que es la manera de evitar que puedan sufrir un golpe de calor. En concreto, para conseguir que este no llegue a producirse, nada mejor que tener en cuenta los siguientes consejos:

Beber mucha agua

Una de las recomendaciones fundamentales que deben tenerse en cuenta a la hora de lograr que un menor no sufra un cuadro de golpe de calor es que beba mucho líquido durante todo el día. En concreto, agua. De esta manera, evitará deshidratarse. Por eso, aunque no tenga gana y se muestre reacio, hay que lograr que cada cierto periodo de tiempo beba un poco. De ahí que, además si se va a salir con este fuera de casa, se lleve a mano una botellita de agua.

Ropa fresca

Otro de los consejos básicos que hay que seguir a rajatabla para evitar que el pequeño tenga una lipotimia es que se le vista con ropa fresca. Eso supone además que la misma sea holgada, porque la ceñida le dificultará la sudoración, y que apueste por colores que sean claros, ya que los oscuros “atraen” más el calor. Asimismo hay que tener en cuenta estas otras recomendaciones al respecto:

• Lo mejor es que lleve prendas de algodón.

• Cuando esté fuera de casa, es fundamental que lleve puesto una gorra o un sombrero, que protegerá su cabeza de los rayos del sol.

Alimentación cuidada y apropiada

Igual que es fundamental que beba mucha agua durante todo el día, no menos importante es que también disfrute de una alimentación sana y apropiada que le refresque durante esos días de calor. Por eso, hay que seguir las siguientes normas al respecto:

• Nada de comidas pesadas, pues le dificultarán la digestión.

• Debe aumentar su ingesta tanto de verduras como de frutas.

• Para merendar nada mejor que un refrescante zumo natural de frutas.

Otros consejos importantes

Además de todo lo expuesto, no menos importante que se tengan en cuenta otras recomendaciones fundamentales que ayudarán a evitar que el niño sufra un golpe de calor. En concreto, entre esas destacarían las siguientes:

• Bajo ningún concepto se le debe permitir que esté fuera de casa en las horas de temperaturas más elevadas.

• Cuando haga mucho calor se le tiene que prohibir que realice una actividad física, como puede ser salir con la bicicleta o jugar al fútbol con los amigos.

• Nunca debe permanecer mucho tiempo dentro del coche, estando este en un lugar donde no hay sombra.

• Estar muy pendiente de su estado físico. Es necesario que se esté atento a si el menor experimenta algún tipo de cambio, como puede ser sudoración o palidez en la piel del rostro, e incluso si se siente decaído. Y es que estas situaciones son síntomas de un golpe de calor. En ese caso, se tendría que actuar de manera inmediata, no sólo poniéndole compresas frías en la cabeza o el cuello, sino también llevándole al hospital.