¿Cómo enseñar a los niños a no escaparse cuando van de la mano?

¿ Cómo enseñar a los niños a no escaparse? Esa situación en la que los niños van cogidos de la mano cuando paseamos con ellos, o por ejemplo los estamos llevando al colegio, y de repente se sueltan y salen corriendo. Si tu hijo sigue huyendo, tal vez pensando que es divertido, en realidad puede ser increíblemente peligroso. Si bien el área en la que se encuentra puede ser segura, aún podría llevarse un susto si por ejemplo se cae de repente. Descubramos cómo evitar esto y que el bebé o el niño entienda que no puede salir corriendo.

Enseñar a los niños a que no se escapen corriendo

Desde bien pequeños, o de hecho, desde que comienzan a caminar, los bebés deben comprender que aunque cada vez se verán más animados a salir corriendo, es importante que se queden a nuestro lado. Por mucho que confíes en ellos y los tengas a vista, el mundo está lleno de peligros y de gente con malas intenciones . Aquí hay algunos consejos que puede probar.

En primer lugar, es importante que los niños aprendan las normas básicas de tráfico o de circulación peatonal. En este caso, es necesario que aprendan cuanto antes que solo pueden cruzar en verde y que además, antes de cruzar deben mirar siempre a los dos lados, además será necesario también que aprendan a caminar con calma y sin correr, prestar atención a su entorno, etc.

Por otro lado, intenta tomar su mano y obsérvalo constantemente si no lo hace. Si no obedece, debes hacerle ver que no puede caminar solo y que no puede comportarse como lo hacen los niños grandes. De hecho puedes recurrir a varias estrategias para que siempre vaya de tu mano.

Por ejemplo, puedes proponerle jugar al «veo veo», mientras vais por la calle, pero que debe darte la mano para que hacer bien el juego. También hacerles sentir mayor y decirles que sean ellos los que nos lleven ellos de la mano. Por ejemplo cuando vamos al colegio. Decirles que podemos jugar a que son ellos los que nos llevan a nosotros, así además de no soltarse, mostrarán como se fijan mientras van caminando y también de alguna manera servirá para que se aprendan el camino a la escuela.

Seguridad primero

Por muy obediente y respetuoso que sea tu hijo, tu papel como padre o madre incluye el deber de vigilarlo constantemente .

Como se mencionó anteriormente, los peligros pueden estar a la vuelta de la esquina. Por esta razón, trate siempre de sostenerle de la mano. Para estar seguro, enséñale su nombre y apellido, así como el tuyo y cualquier número de teléfono que el niño pueda llevar consigo.

Los lugares llenos de gente

En caso de lugares concurridos, es posible que desee volver a utilizar el cochecito . De esta forma te sentirás más seguro y evitarás cualquier tipo de problema. Recuerda que los niños pueden ser impredecibles , pero con la práctica adecuada es posible que podáis hacer cualquier cosa juntos.