informe anual

El 26% de los atendidos por Proyecto Hombre en Baleares el año pasado fue por adicción al alcohol

La asociación atendió a 2.559 personas durante 2023 en las Islas, un 21,7% más que el año anterior

Del total de las personas asistidas por la entidad, el 77,2% eran hombres y el 22,8% mujeres

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El director de Comunicación y Proyectos de Projecte Home en Baleares, Antoni Parets, el presidente ejecutivo, Jesús Mullor, y la directora de Projecte Jove, Cati Limongi.
Pedro Serra

La adicción al alcohol ocupa hasta el 25,8% de las personas atendidas por Proyecto Hombre en Baleares, que en 2023 asistió a un total de 2.559 usuarios en las Islas, un 21,7% más que el año anterior.

Son datos del informe anual de la entidad presentados este martes, que indican que del total de las personas atendidas durante el 2023, el 77,2% eran hombres y el 22,8% mujeres.

El presidente ejecutivo de la asociación en Baleares, Jesús Mullor, ha explicado que el incremento se debe a que entre las personas afectadas por las adicciones «cada vez se acepta más la necesidad de ayuda» y, por tanto, acuden a los servicios de atención. «Si la sociedad, en vez de penalizar a una persona que da el paso para buscar ayuda, la ayuda, eso es una buena noticia», ha afirmado.

Si la principal adicción de las personas atendidas por Proyecto Hombre en el archipiélago es el alcohol, la segunda es la combinación de alcohol y cocaína, con un 23,3%. En tercer lugar, se sitúa el consumo de cocaína, en un 23%. Por último, se encuentra el cannabis con un 10,7%.

En menor proporción se encuentran las adicciones comportamentales, que representan un 8,8% de los atendidos. Un escalón por debajo están la heroína o los opiáceos con un 5,6%, y, por último, las benzodiacepinas, en un 1,3%.

Desde Proyecto Hombre han detallado que durante el año 2023 en Baleares hubo una media de 793 personas al día en tratamiento, lo que supone un incremento del 12,7% con respecto al año anterior, siendo la franja de 30 a 39 años el grupo de edad mayormente tratado (30,1%). El colectivo de 40 a 44 años representó el 28,5% de los tratados, mientras que los menores de 30 años fueron el 22,9% y las personas mayores de 50 años fueron el 18,6% de los casos.

Además, Mullor ha destacado que el 53,8% de las personas presentaban «ciertos problemas» a nivel de salud mental, con cuadros depresivos o de ansiedad, lo que, ha dicho, «es superior a la media de Baleares y España, unos ocho puntos».

Adicciones entre jóvenes en Baleares

Por otro lado, Proyecto Hombre en Baleares proporcionó atención terapéutica a un total de 181 jóvenes de entre 14 y 23 años durante el 2023, la mayor parte de ellos con estudios de Primaria y ESO finalizados. El cannabis, con el 37,6% de los casos, es la «la sustancia principal para la que las familias piden ayuda», ha detallado la directora de Projecte Jove, Cati Limongi.

El segundo lugar lo ocupa las adicciones sin sustancia como «las apuestas, los videojuegos, la pornografía o las redes sociales», que representan el 23,2% del total de los atendidos en Baleares. En cuanto a la cocaína y a la cocaína combinada con el alcohol, fueron el 23,3 y el 18,8%, por encima sólo del alcohol, que fue el 3,9%; y las benzociacepinas y la heroína afectaron el 3,9 y 3,3%, en cada caso, de las personas atendidas.

En relación a las redes sociales y al uso del móvil, Limongi ha explicado que «la alarma surge» con los problemas relacionados con la adicción a sustancias y ha puntualizado que todavía «se normaliza el consumo y no se considera un problema» el abuso de la tecnología de la misma manera que antes se «banalizaba» el consumo del alcohol por ser una sustancia legal, ahora «pasa lo mismo con las redes y sus efectivos abusivos en la juventud».

Por ello, considera que «se debe educar a las futuras generaciones», ya que su adicción conlleva algunas consecuencias como, ha detallado, los trastornos de atención, al igual que la sensación del ritmo Whatsapp, en el que «no se sabe esperar a las cosas y todo ha de ser rápido» o, ha ejemplificado, «la falta de vivencia del aquí y el ahora», es decir, la ausencia de presencialidad.

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