El terremoto en Cabo de Palos deja 18 réplicas y daños en el aeropuerto de Almería y un concesionario
A pesar de la magnitud del seísmo (5,4) no se han registrado heridos ni incidencias graves
La Junta de Andalucía mantiene activa la preemergencia por tsunami «desde el punto de vista preventivo"


El terremoto de magnitud 5,4 y epicentro en aguas del Mediterráneo, frente a la costa de Almería, ha dejado 18 réplicas de menor intensidad en la zona hasta las 9:55 horas y daños materiales leves en el aeropuerto de Almería, donde se ha derrumbado parte del techo de una cafetería, y en un concesionario de Huércal de Almería. No hay que lamentar heridos.
El primero de los terremotos, con epicentro en Cabo de Palos a las 7:13 horas, se ha registrado a unos 32 kilómetros de Níjar (Almería) y se ha sentido principalmente en la provincia almeriense, aunque también en Granada, Jaén, Málaga, Murcia, Alicante, Albacete, Ciudad Real, Madrid y Melilla. También se ha podido sentir en zonas de Marruecos y Argelia. En ninguno de estos casos se han producido daños personales ni incidencias graves.
La sacudida, inicialmente fijada en una magnitud de 5,5, se ha reducido finalmente a 5,4. Al temblor le han seguido cerca de una veintena de réplicas menores, la mayor de ellas de magnitud 3,4.
Los daños materiales más relevantes han tenido lugar en Almería, donde se ha desprendido parcialmente el falso techo de la cafetería situada en la zona de facturación del aeropuerto, situado a las afueras de la capital. La zona ha sido acordonada sin registrarse daños personales. También se ha derrumbado un falso techo en un concesionario Toyota de Huércal de Almería.
Ante estas circunstancias excepcionales, el Instituto Geográfico Nacional (IGN) ha alertado del riesgo de tsunami en el Mediterráneo y la Junta de Andalucía mantiene activo el plan por maremotos «desde el punto de vista preventivo y sólo en materia de seguimiento y evaluación».
Por su parte, el Ayuntamiento de Lorca (Murcia), ha activado en su fase de preemergencia su plan territorial de protección civil y está evaluando el estado de algunas infraestructuras del municipio, que ya resultó afectado gravemente por dos seísmos en mayo del año 2011.
El seísmo ha activado el sistema de alertas sísmicas de Android e iOS, que con notificaciones automáticas a teléfonos móviles ha despertado a numerosos vecinos de las provincias de Almería, Granada y Albacete.
La alerta incluía un conjunto de recomendaciones detalladas para actuar tras un terremoto, entre ellas: ponerse zapatos antes de moverse, incluso dentro de casa, y comprobar si hay olor a gas, en cuyo caso se aconseja cerrar la llave de paso del edificio o evacuar si no es posible hacerlo con seguridad. También se instaba a apagar incendios pequeños si se detectaban, comprobar posibles daños en el cableado, las tuberías y los electrodomésticos, y recoger agua, medicamentos y provisiones básicas si hay cortes de suministro. En zonas costeras, se recomendaba desplazarse a lugares elevados tras el temblor ante el riesgo de tsunami. Igualmente, anticipaba que podría haber réplicas e incluía acceso a información adicional y configuración del sistema de alertas.
«Ha sido espectacular»
El susto ha sido notable, tal como muestran varios testimonios recogidos por Efe. Verónica, periodista residente en Almería, en un quinto piso, asegura que ha tenido que sujetarse al marco de la puerta: «Venía acompañada de un ruido extraño, un zumbido con tintineo que me ha puesto muy nerviosa. Mi marido gritó ‘¡terremoto!’ y mi hija se despertó llorando».
Jesús, trabajador público, ha relatado cómo tintinearon las vitrinas y se escuchó un rumor profundo: «Lo que más me ha sorprendido ha sido la duración. Mis hijas, sin embargo, han seguido durmiendo como si nada».
Así se ha movido la lámpara con el #terremoto de Almería, es un ejemplo, le acabo de dar yo con la mano que me ha pillado durmiendo pic.twitter.com/XSbOp5GvvY
— Cucha que te diga (@Cuchadiga) July 14, 2025
En otros municipios como Los Gallardos (Almería), Inma, funcionaria, tomó de la mano a sus hijos nada más recibir la alerta en el móvil. Antonio, vecino del barrio almeriense de Vega de Acá, recibió la notificación mientras vestía a sus hijas para la escuela de verano: «Todo ha quedado en un susto», ha afirmado.
Alba, también en la capital, saltó de la cama y buscó refugio para sus perros bajo una mesa, mientras que Federico, que se encontraba en la calle paseando a su mascota, percibió el temblor segundos antes de que su perro comenzara a ladrar: «Una puerta de cochera temblaba. Ha sido espectacular», ha resumido.