Macarena Olona quiso seguir hasta que la prescripción médica se lo impidió
La decisión de Macarena Olona de dejar la política ha pillado a todos por sorpresa. Incluso a sus más allegados. Fuentes próximas a la formación en la comunidad y a la propia Olona aseguran haberse enterado este mismo viernes. Tras tres años en la primera línea política, Olona dice basta tras una dura campaña electoral en la que comenzó a sentir las primeras señales de su cuerpo pidiéndole un respiro. No las atendió. Y los médicos, en contra de su voluntad, le han recomendado que pare. No ha tenido más remedio.
Macarena Olona, guste o no guste como política, es una trabajadora nata. Además, las elecciones del pasado 19 de junio en Andalucía supusieron un cambio tan repentino para la alicantina que tuvo que aplicarse el doble: llegaba a un nuevo territorio, con nuevos compañeros y con solo unas semanas para prepararse.
Apenas sin descanso, Olona trabajó a destajo para intentar meter a Vox en el Parlamento de Andalucía. Haciendo caso omiso a las señales de un cuerpo que le pedía descanso, la candidata de Vox, según ha podido saber OKDIARIO Andalucía, perdió mucho peso en la campaña electoral. Por suerte, ha decidido que se imponga la cordura y priorizar su salud. Después, tal y como ha anunciado, no volverá al ruedo político, sino dará «continuidad a mi vocación de servicio público como Abogada del Estado. Desde donde seguiré sirviendo a los españoles, a quienes sólo puedo decir gracias».
Olona ha comunicado esta decisión este mismo viernes al presidente de Vox, Santiago Abascal. Y el partido, en un comunicado, asegura que Olona deja «una huella imborrable de ejemplo y trabajo».
Por su parte, el consejero de la Presidencia, Interior, Diálogo Social y Simplificación Administrativa, Antonio Sanz (PP), ha trasladado este viernes, en nombre del Gobierno andaluz, «respeto y cariño» a la hasta ahora portavoz parlamentaria de Vox en Andalucía, Macarena Olona, y le ha deseado «mucha salud» tras anunciar que abandona la política por motivos de salud.