Importante alerta de los investigadores: los plaguicidas arrastran a los anfibios a una crisis mundial sin precedentes
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Los anfibios viven una crisis sin precedentes en España. Especialmente por la combinación de la contaminación química y de enfermedades emergentes, que acelera su declive poblacional. En este sentido, los plaguicidas están siendo muy relevantes.
Un estudio del Proyecto AMPHIDEB, coordinado por el Instituto de Investigación en Recursos Cinegéticos (IREC), ha señalado que la interacción entre plaguicidas agrícolas y patógenos puede multiplicar el impacto sobre especies sensibles como el sapillo pintojo, lo que sitúa a estos vertebrados al borde del colapso.
Una de las conclusiones más importantes del estudio publicado en
Science of the Total Environment es que los riesgos a los que se enfrentan los anfibios no pueden analizarse de forma aislada, ya que en la naturaleza actúan varios factores de manera simultánea.
Los plaguicidas que pueden poner en riesgo a los anfibios
El trabajo experimental se centró en analizar los efectos combinados del herbicida 2,4-D y del hongo quitridio Batrachochytrium dendrobatidis.
El 2,4-D se utiliza de forma habitual en campos de cereal para eliminar plantas de hoja ancha y se aplica, principalmente, entre finales del invierno y principios de la primavera.
Este periodo coincide con la reproducción de muchos anfibios, lo que incrementa el riesgo de que el producto alcance charcas y zonas húmedas cercanas por deriva o escorrentía.
El hongo quitridio es el responsable de la extinción de cientos de poblaciones de anfibios a escala mundial, incluidas algunas en España. Sus esporas acuáticas infectan la piel de los anfibios, y alteran funciones vitales hasta provocar la muerte de los individuos más vulnerables.
La crisis global que puede acabar definitivamente con los anfibios
Los anfibios presentan una elevada vulnerabilidad a las alteraciones de su entorno debido a su biología y a su estrecha relación con los medios acuáticos.
De hecho, en las últimas décadas, se han documentado numerosos declives poblacionales y extinciones locales en todo el mundo. La contaminación química y las enfermedades emergentes figuran entre las amenazas más habituales, pero su impacto se ve amplificado cuando actúan de forma combinada.
Según el estudio, esta sinergia explica por qué el declive de los anfibios ha alcanzado una escala global. La exposición a contaminantes puede debilitar a los individuos y alterar su respuesta frente a patógenos.
Todo ello se traduce en que las infecciones, que en otras condiciones serían tolerables, se convierten en procesos letales para las poblaciones.
IREC avisa sobre cómo los plaguicidas están afectando a los anfibios
Muchos anfibios se encuentran entre las especies más amenazadas del mundo, y estudios como este demuestran por qué se ha llegado a esta situación.
La exposición al hongo afecta al crecimiento y a la condición corporal de los sapillos pintojos, especialmente cuando se trata de cepas más virulentas. La combinación con plaguicidas es letal. ¿Por qué?
El herbicida 2,4-D reduce el crecimiento larvario, dando lugar a juveniles de menor tamaño, una característica asociada en la naturaleza a una menor probabilidad de supervivencia.
La mezcla del 2,4-D con una cepa menos virulenta del hongo generó efectos tan severos como los provocados por cepas más agresivas en solitario. Es decir, evidencia que los fitosanitarios pueden alterar el equilibrio entre patógenos y hospedadores.