Varios policías heridos, uno de gravedad, tras ser agredidos por los ocupantes de una patera en Almería
El sindicato SUP denuncia la alarmante falta de personal para recibir a los inmigrantes que llegan de forma irregular
Otro de los inmigrantes estaba reclamado por Francia para cumplir una pena de 30 años de prisión
La Policía Nacional en Almería ha detenido a tres de los cuatro ocupantes de una patera que fue rescatada en aguas próximas a Cabo de Gata (Almería). Uno de los inmigrantes arrestados está acusado de tráfico de drogas y pertenencia a una organización criminal y los otros dos por atentado y lesiones tras agredir violentamente a los policías que los trasladaban desde la patera al Centro de Atención Temporal de Extranjeros (CATE). Los dos presuntos agresores de los policías han ingresado en prisión provisional por orden judicial. Durante el suceso, varios agentes sufrieron heridas y tuvieron que recibir asistencia médica. «Uno de ellos sufrió lesiones graves, con rotura de tibia y ligamentos». Sobre uno de ellos pesaba una Orden Europea de Detención emitida por Francia.
Los hechos tuvieron lugar el pasado 21 de enero, cuando los policías rescataron a la patera y a sus ocupantes. Ya en tierra, y cuando la Policía iba a ingresarlos en el CATE de Almería, dos de los inmigrantes se arrojaron sobre los agentes y les agredieron salvajemente. Durante la refriega varios policías resultaron heridos, uno de ellos de gravedad, y fueron detenidos los dos agresores. Los dos arrestados que agredieron a los agentes fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción Número 3 de Almería, que ordenó su ingreso en prisión provisional.
Entre tanto, el Grupo de la Unidad Contra las Redes de Inmigración y Fronteras (UCRIF) de la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras llevó a cabo las gestiones pertinentes para acreditar la identidad del resto de los integrantes de la patera. Para ello, la Policía Nacional solicitó la colaboración del Centro de Cooperación Policial de Irún y de las autoridades francesas, que confirmaron que sobre uno de ellos pesaba una Orden Europea de Detención y Entrega en vigor, emitida por Francia, por delitos por los que el país galo solicitaba para él una pena de 30 años de prisión. En este caso, los investigadores sospechan que el detenido huyó de Francia e intentaba entrar en patera en España para comenzar una nueva vida en España. Los policías le pusieron a disposición del Juzgado Central de Instrucción Número 2 de la Audiencia Nacional.
La investigación sigue abierta para identificar al responsable de la embarcación y determinar su implicación en un posible delito de tráfico de personas. El objetivo de los policías es desmantelar la organización criminal detrás de la travesía de la patera.
Falta de policías
Desde el Sindicato Unificado de Policía (SUP) denuncian la falta de policías para recibir las continuas pateras que arriban a costas españolas. Una situación muy común en los Centros de Atención Temporal a Extranjeros de la costa mediterránea, especialmente en Almería o Cartagena. «Si esto pasa en Almería, imagínate en un CATE como el de Cartagena a medio construir con sacos de escombro y material de obra a mano, sin protocolos y sin medidas apenas de seguridad», puntualiza el máximo representante del SUP en Murcia.
En Cartagena, por ejemplo, se han vivido situaciones especialmente graves cuando sólo había dos agentes disponibles para controlar el desembarco de una patera con decenas de inmigrantes. Ahora, una vez reforzado el servicio, lo habitual es que sean cuatro agentes los que se encarguen y en ocasiones hasta seis. Un número de cualquier forma escaso, que obliga a sacar a policías de las calles para atender el trabajo creciente en el Centro de Atención de Extranjeros.
«Se ha dado la situación de que ninguna patrulla ha podido acudir a tiempo a atender un caso de homicidio porque los que había disponibles estaban atendiendo la llegada de pateras», añaden fuentes policiales.