La novia del presunto asesino de Meco: «El sabía un atajo para llegar al lugar del crimen»

OKDIARIO accede al contenido de la cuarta y última declaración de Celia, la ex novia del presunto asesino de Miriam en Meco, en la que arroja más sospechas sobre el que fue su pareja.  Lo cataloga de violento, de usar armas blancas y de conocer un atajo para llegar hasta el lugar donde se halló el cadáver de Miriam. Estas últimas revelaciones han desencadenado que el abogado de la familia de la víctima pida a la juez del caso que tome declaración a Celia cuanto antes.

El 16 de enero de 2019 Miriam compartía vivienda con Celia y Sergio, el novio de ésta última, en Meco. Sergio fue el último que vio con vida a Miriam cuando salió a sacar a los perros. Alguien la asesinó brutalmente entre las 20:34 y las 20:52 de ese día. Celia llegó a casa poco antes de las 22 horas, le preguntó a Sergio por el paradero de Miriam y alarmada porque no había regresado salió a buscar a su amiga. Ya era tarde, Miriam había sido asesinada. Tras descartar a varios sospechosos, la Guardia Civil se centró en Sergio y lo arrestó ocho meses después cuando descubrió ADN de Sergio en la sudadera de la víctima. Sin embargo la investigación del teléfono del presunto asesino es discutible, y salvo el ADN sólo quedan un puñado de indicios. En estas circunstancias las declaraciones de Celia cobran valor añadido y salvo la primera que hizo horas después del crimen dejando a Sergio en una posición neutra, en el resto comenzó a volcar sospechas sobre Sergio que no le dejan en buen lugar.

Fue en su segunda declaración cuando Celia insinúa que Sergio estaba muy tranquilo a pesar de que Miriam no volvía a casa esa noche, meses después en su tercera declaración Celia relató que Sergio llevaba la noche del crimen una ropa diferente a la que él aseguraba que vestía. Celia añadió también que a Sergio no le gustaba que ella llegara tarde a casa, salvo la noche del crimen en que cambió de parecer y le dio el visto bueno para quedarse tomando unos refrescos antes de regresar al chalet que compartían con la víctima.

Sin embargo ha sido en la última declaración que ahora ve la luz en la que Celia carga las tintas sobre el que fue su pareja. Celia acudió a la Guardia Civil y les contó que cuando salía de excursión con Sergio a pescar éste le decía que en lugares como ese podría matarla y deshacerse de su cuerpo sin que nadie lo supiera. Celia también cuenta que la noche del crimen sólo una hora después de que se cometiera el asesinato, cuando ella llegó a casa Sergio estaba con un gorro puesto cosa que jamás hacía dentro de la vivienda (Sergio mantiene que no salió de su casa en toda la tarde). Quizá lo más relevante que aporta Celia es que un par de días después del crimen  Sergio la llevó hasta el lugar donde se encontró el cadáver de Celia a través de un atajo, cuando uno de los argumentos de la defensa de Sergio es que no tuvo tiempo de cometer el crimen y volver a su casa en menos de 20 minutos.

Celia termina su declaración recordando que a Miriam la mataron cuando paseaba los perros de ambas, y desde el asesinato los perros están recelosos con Sergio. También que Sergio era violento y había manejado armas blancas años atrás.

Hasta el momento ni la juez ni la Guardia Civil han reaccionado a ésta última manifestación de la novia del presunto asesino ante la Guardia Civil, pero tras salir a la luz la declaración el letrado de la acusación Vicente Sánchez pide que la juez llame a declarar a Celia. El abogado de la defensa, Ignacio Menéndez, cree que se trata de falsedades y comentarios malintencionados de Celia movida por el despecho ya que durante la investigación del crimen se descubrió que Sergio mantenía cierta relación sentimental con otra mujer. El abogado de Sergio incluso afirma que sospecha que Celia está encubriendo a los verdaderos autores del crimen. Ambas, acusación y defensa, tendrán la oportunidad de interrogar a Celia si la juez lo estima conveniente antes de que se cumplan dos años del salvaje crimen de Miriam Vallejo.