Mide tu cuello, descubre riesgos: cómo una cifra simple puede revelar mucho sobre tu salud
La circunferencia del cuello refleja en muchos casos la acumulación de grasa en la parte superior del cuerpo, conocida como grasa visceral

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El grosor del cuello —o más exactamente la circunferencia del cuello— está convirtiéndose en una herramienta sorprendentemente útil para diagnosticar riesgos de salud. Aunque solemos centrarnos en el índice de masa corporal (IMC) o la cintura, varias investigaciones muestran que una medida sencilla como la de tu cuello también puede ser un indicador de enfermedades serias.
La circunferencia del cuello refleja en muchos casos la acumulación de grasa en la parte superior del cuerpo, conocida como grasa visceral o grasa subcutánea en la zona del cuello. Esa grasa no es inerte: puede liberar ácidos grasos libres, sustancias inflamatorias y afectar la sensibilidad a la insulina, la presión arterial o el metabolismo de los lípidos.
Además, es una medida fácil de obtener, poco invasiva, que no depende de la comida reciente ni de la respiración al medirla, lo que la convierte en una opción interesante para evaluaciones rápidas.
Principales enfermedades y riesgos asociados
Síndrome metabólico y resistencia a la insulina
Estudios poblacionales muestran que por cada incremento de una desviación estándar en la circunferencia del cuello, aumenta de forma significativa el riesgo de resistencia a la insulina, presión arterial elevada, triglicéridos altos o colesterol bueno bajo.
Por ejemplo, en el estudio ELSA-Brasil se encontró que un aumento de esta medida se asociaba con mayor probabilidad de los factores de riesgo del síndrome metabólico.
Diabetes tipo 2 y enfermedades del hígado graso no alcohólico (NAFLD)
Una investigación dirigida a mujeres posmenopáusicas con IMC normal encontró que una mayor circunferencia del cuello aumentaba de manera notable el riesgo de hígado graso no alcohólico, incluso ajustando por cintura, IMC y otros factores.
Asimismo, se han asociado cuellos más anchos con mayor probabilidad de diabetes tipo 2, al reflejar una acumulación de grasa que altera el metabolismo de la glucosa.
Enfermedades cardiovasculares
Cuanto mayor la circunferencia del cuello, mayor el riesgo de eventos cardiovasculares. En un estudio con personas con diabetes tipo 2 en China, la parte superior de la medida de cuello estaba asociada con mayor riesgo tanto de sufrir enfermedad cardiovascular como de tener eventos en un plazo de 10 años.
Adicionalmente, se ha observado relación con hipertensión, dislipidemia y otros factores de riesgo coronario.
Hiperuricemia (ácido úrico elevado) y posibles problemas articulares
Otra investigación detectó que una mayor circunferencia de cuello se asociaba de forma independiente con niveles altos de ácido úrico (hiperuricemia), lo que a su vez puede aumentar el riesgo de gota y otros problemas relacionados.
Obesidad, acumulación de grasa y evaluación antropométrica
Aunque el cuello no reemplaza a la cintura o al IMC, sí sirve como marcador auxiliar de acumulación de grasa en la parte superior del cuerpo. Estudios en adultos jóvenes españoles mostraron correlación entre circunferencia del cuello y masa grasa visceral medida por DXA.
¿Qué valores se consideran de riesgo?
No hay un consenso universal para todos los grupos étnicos, pero algunas cifras orientativas indican que:
- En muchos estudios, una circunferencia de cuello por encima de 39-40 cm en hombres y 33-34 cm en mujeres se asocia con mayor riesgo de síndrome metabólico.
- Otro artículo refiere que por encima de 43 cm en hombres y 35 cm en mujeres podría considerarse de mayor alerta.
Es importante destacar que estos valores varían según la etnia, edad, altura y otros factores, por lo que no se trata de un diagnóstico sino de una señal para prestar atención.
¿Qué hacer si tu cuello ‘sobresale’ en la medida?
- Consulta con tu médico o nutricionista para evaluar los factores de riesgo: presión, glucosa, lípidos, etc.
- Adopta un estilo de vida saludable: dieta equilibrada, ejercicio regular (especialmente cardiovascular y entrenamiento de fuerza), descanso adecuado.
- Controla otras medidas antropométricas clave: cintura, IMC, porcentaje de grasa corporal si es posible.
- Haz seguimiento médico de factores cardiometabólicos si se detectan medidas de cuello elevadas, porque puede ser un despertador temprano del riesgo.