El pacto PSOE-Bildu se cuece a fuego lento

Que José Luis Rodríguez Zapatero, que ha sido en numerosas ocasiones el hombre de Pedro Sánchez para desencallar los asuntos espinosos del partido, esté maniobrando bajo cuerda para acercar el PSOE vasco a Bildu no es un asunto menor. Más aún, cuando la postura que tomen los socialistas será clave para configurar el gobierno vasco que salga de las elecciones del 21 de abril. Eso de que el PSE no pactará con los proetarras está por ver, sobre todo, cuando se intensifican los movimientos en sentido contrario. Y, porque es de una candidez superlativa pensar que en este asunto Zapatero va por libre.
Sus palabras sobre Bildu son premonitorias de lo que puede ocurrir: «No hay que negarse a poder gobernar juntos». Las encuestas prevén un escenario de máxima igualdad entre PNV y la formación de Arnaldo Otegi y los socialistas se verán obligados a decantarse por uno de sus dos socios de Gobierno en España. El mensaje es que con Bildu, no, pero tras las palabras de Zapatero no se descarta que se haya producido un encuentro privado y secreto entre dirigentes del PSOE vasco actual y los de Bildu de cara a tejer confianzas para gobernar conjuntamente.
«Si los números dan, no debemos renunciar a un gobierno más progresista en el País Vasco», aseguran que dijo el ex presidente del Gobierno ante dirigentes del PSE. Verde y con asas. Algo se está tramando entre bambalinas y en el PNV temen que Sánchez les venda en el último minuto. Varios miembros de la dirección que lidera el candidato socialista Andueza creen que «ha llegado el momento de un cambio en el País Vasco». Todas las posibilidades están abiertas, pero en los últimos días son cada vez más las voces que se apartan del discurso oficial de que no habrá pacto con los proetarras. La hipótesis cobra cuerpo si tenemos en cuenta que todas las negaciones de Sánchez terminan por hacerse realidad. Al fin y al cabo, del «no habrá pacto con Bildu» al pacto con Bildu sólo hay un cambio de opinión.