The Black Madonna: «Mirar con desprecio a los refugiados es pecar sobre el pecado»
Marea Stamper, más conocida como The Black Madonna, se encuentra inmersa en su gira 'Choose Love' para recaudar fondos en favor de los refugiados.
'Choose Love Tour' pasará por la Sala Nitsa de Barcelona y el club Mondo de Madrid, los próximos 2 y 22 de febrero respectivamente.
Marea Stamper es, actualmente, una de las DJs más reconocidas en el mundo entero. Aunque puede ser que no la conozcas por ese nombre, a menos que seas un fanático de la música electrónica. El éxito de The Black Madonna, el nombre artístico que le debe a la iconografía católica, radica en el dinamismo y la variedad que impregna en todas sus actuaciones y producciones. Ahora, se encuentra inmersa en su tour ‘Choose Love’, cuya recaudación se destina a la ONG británica ‘Help Refugees’ y a su filial ‘Say It Loud’, que dan soporte y ayuda a inmigrantes en situación de necesidad.
Stamper nos recibe en su habitación del hotel Puerta de América de Madrid. Lo primero en lo que se fija es en el Mickey Mouse de mi camiseta: «¡Oh! He estado a punto de ponerme una camiseta de Mickey, podríamos haber sido gemelos» comenta entre risas. Su cercanía y naturalidad generan un ambiente distendido, y hasta familiar, que provoca que la entrevista se alargue más de lo previsto. The Black Madonna conversa con OKDIARIO sobre música, sus sueños, inmigración y Donald Trump pero, sobre todo, habla de su experiencia personal en el mundo que nos rodea y su forma de entender la sociedad actual.
Pregunta.- ¿Cómo conociste a la ONG ‘Help refugees’?
Respuesta.- Todo empezó por una camiseta. Estaba comprando en una web y encontré un sitio donde se donaba parte del precio de la camiseta a la ONG ‘Help Refugees’. Me gustó la camiseta, decía ‘Elige el amor’, y pensé ‘¡Qué buen mensaje!’. Estaba aburrida ese día y compré varias de ellas. La llevaba regularmente y resulta que la ONG tiene una base en Londres. Me sacaron una foto, ellos lo vieron y conectamos. A la vez, algo estaba pasando en mi vida personal y empecé a involucrarme con unos amigos que habían tenido problemas por ser gays en su país de origen. Hablé con mi amiga Diana sobre esto. Ella trabajaba con diferentes ONGs y organizaciones caritativas y llegamos a la conclusión de que la mejor manera de ayudarles era con dinero, porque es lo que más necesitan. No necesitan camisetas o calcetines. Muchos de los que pasan por el proceso de refugiado solamente necesita ser capaz de gastar su propio dinero y de tomar sus propias decisiones sobre lo que es mejor para ellos porque no son niños. Bueno, algunos lo son pero no la mayoría. Mi amiga se dedicaba a dar asistencia económica para averiguar dónde estaban y adónde iban. Así que les di dinero y pensamos que podría ser algo que se extendiera.
P.- ¿Y cómo nació ‘Choose Love Tour’?
R.- ‘Help Refugees’ tiene una organización filial llamada ‘Say It Loud’ que ofrece apoyo directo a refugiados que, además, son LGTBI y tratan de entrar en Reino Unido. Fui a una de sus fiestas de los viernes, conocí a su fundador y a mucha gente envuelta, y dije: «¡Hagámoslo! ¿Qué puedo hacer para ayudar?». Y así nació ‘Choose Love Tour’. El merchandising es una parte muy importante del negocio de un DJ y adquirí el compromiso de que el dinero generado por esa parte de mi negocio iría siempre para ayudarles. Y desde entonces destino esa parte de la recaudación de mis tours para cubrir costes legales y otros asuntos. Aunque no vengas al tour, el merchandising está disponible en Internet. Esto permite que mucha gente se involucre mostrando públicamente su apoyo a un bajo coste vistiendo la camiseta y ademas una donación económica. Ha sido extraordinario, la respuesta ha sido brutal.
P.- Parece que los problemas políticos mundiales de hoy en día están provocando una polarización de las opiniones. Movimientos de extrema derecha, Donald Trump, beligerancia contra la inmigración… ¿cuál es el origen de esto?
R.- Occidente es responsable del movimiento de millones de personas. Todo desde la guerra de Irak, que provocó un efecto dominó gigante, un número enorme de intervenciones americanas en Sudamérica, la desestabilización de gobiernos… La gente en Occidente, Europa y América sobre todo, debería estar concienciada de que las personas que llegan a su puerta buscando seguridad, no llegan ahí por coincidencia. No es algo aleatorio. Es una cuestión de vida o muerte y que ha sido originada por movimientos geopolíticos muy complejos y guerras financiadas económicamente y militarmente, en su mayoría, por EEUU. Es por eso que mirar a esa gente que llega a nuestras costas con desprecio es realmente… añadir un pecado a otro pecado. Porque, de hecho, tú y yo vivimos en países que están conectados a las razones de ese movimiento en origen. Incluso en países en los que la gente es perseguida por ser gay, muchos de esos gobiernos han sido desestabilizados por intervenciones o guerras americanas. O incluso cambiados por misioneros americanos, movimientos de derecha y religiosos exportados a esos países. Son muchas las causas de esa necesaria migración. Son el resultado de una ola que vivimos en Occidente, de la forma que tenemos de hacer política con el mundo. Es una visión super simplificada de una cuestión muy rica y profunda.
P.- ¿Cuál crees que es la solución?
R.- Creo fuertemente que somos responsables de nuestros hermanos y que nuestros vecinos son nuestra responsabilidad. Independientemente de que tengas fe o no, no creo que sea una coincidencia que en la mayoría de las religiones, la manera en la que tratas al prójimo o al extraño o a un refugiado es uno de los más altos compromisos. Y podemos verlo una y otra vez en todos los libros sagrados. Es una cosa universal. «Fui forastero y me acogisteis». Esto no son conceptos abstractos, son conceptos que tienen que estar entre los más profundos estándares de cómo se supone que tenemos que tratar al otro.
Yo sé que la gente tiene miedo de que las ciudades cambien. Tienen miedo de perder su identidad. De que su mundo cambie pero…¡El mundo está cambiando! Y lo que realmente importa es que, dentro de 30, 40 o 50 años, miremos atrás y analicemos cómo actuamos como cambio y cómo nos tratamos entre nosotros. Es absolutamente esencial que empecemos a comprender la absoluta seriedad de esto. No es un juego, no trata sobre tu identidad. Esto va de personas que llegan a nuestras costas y que están entre las más en peligro y desesperadas personas que nunca han vivido en esta tierra. Y necesitan nuestra ayuda, no nuestra demonización. La gente que corre en condiciones extremas en la frontera de EEUU con México, o los que cruzan aguas bravas llevando a sus hijos toma esa decisión para tratar de conseguir una vida mejor. Y se les recibe con todo menos con amor. Ahora es el momento de comprobar tu humanidad, tu empatía. Y yo pienso que solo hay una forma de responder a eso.
P.- ¿Eres una persona religiosa?
R.- Sí. Soy católica. Mala católica, pero católica en definitiva.
P.- Mientras las nuevas generaciones parece que avanzan hacia la globalización, la desaparición de las fronteras y el hermanamiento del ser humano, en otros lados proliferan los nacionalismos y los extremismos. ¿Cómo ves esta confrontación? ¿Quién crees que prevalecerá?
R.- Los nacionalismos son los estertores moribundos de esa forma de pensar. Pero también hay que decir que un animal herido es más peligroso es sus últimos jadeos. Por esto hay una evidente radicalización de posturas, especialmente en hombres jóvenes en América y en Europa. Pero, aun así, no son una mayoría ni están cerca de serlo. Son una minoría muy triste y muy sola, pero nosotros tenemos que tomarles en serio.
P.- ¿Cuál crees que es el futuro de Donald Trump?
R.- En los EEUU tenemos a Trump, esta especie de ilusión negacionista evidentemente planeada. Volvamos al momento de las elecciones: ¿piensas de verdad que piensa que los mexicanos son violadores? ¿Realmente opina eso de agarrar a las mujeres por…? Mucha gente dice que probablemente lo decía por la campaña, poner a todos esos blancos nacionalistas entre sus consejeros es solo una táctica. Esto supera mi comprensión: ¡por supuesto que todo es real! Trump es un hombre que ya tiene serios cargos contra él en temas de derechos civiles. Tenía un código especial para inquilinos negros cuando era administrador de propiedades. Asegurándose de que no pudieran conseguir una casa. Es algo loco, muy loco. Tenemos que empezar a llamar a estas cosas por lo que son. Donald Trump es un loco y frío supremacista blanco. Su padre fue miembro del Ku Klux Klan que fue arrestado en una de sus acciones. Y la manzana no ha caído lejos del árbol.
P.- ¿Por qué ha llegado Trump a La Casa Blanca?
R.- Trump habla un lenguaje, que ha aprendido directamente de su familia e historia, a gente que son pobres, con miedo y con poca educación. Les dice qué hacer y les da un ‘hombre del saco’ con el que pretende justificar sus miedos antes que mostrar la causa real de sus problemas: la pobreza que generan grandes negocios como el suyo, el turbocapitalismo, quitar a la gente el acceso al sistema de salud… Son conceptos muy complejos que él explica con simples ‘hombres del saco’ sobre raza, clase y género. Es un hombre que dijo que las mujeres deberían ser castigadas por abortar cuando quería ser presidente. Es un monstruo y tiene que ser echado de La Casa Blanca de inmediato. Tiene que ser reemplazado por, literalmente, cualquiera: por mi perro, por un niño de guardería…literalmente cualquier otra persona. Pero se tiene que ir ya porque, no solamente es peligroso, sino porque se convierte en un ejemplo peligroso para otra gente. La idea de que cualquiera puede llegar a ser presidente, que no requiere habilidades especiales, que no requiere integridad… Y con integridad no me estoy refiriendo a Clinton acostándose con una becaria. Me refiero a integridad a un nivel más profundo. No podemos vivir en un mundo en el que las normas y todos los valores, como la decencia, se han perdido. Trump se autoproclama el líder del mundo y esto tiene que terminar.
P.- Cuando hablamos de derechos LGTBI en Occidente, muchas veces, parece que se pierde de vista una visión conjunta del problema. Mientras en algunos países el debate gira en torno a las marchas del orgullo gay o a banderas colgadas en balcones, en otro países, no existe tal debate y se condenan a muertes a personas por ser homosexuales. ¿Cómo se puede ayudar a esos países en los que los derechos humanos se pisotean bajo el amparo de la ley?
R.- Es una de las razones por las que estoy trabajando directamente con gente que necesita ayuda. Es importante apoyar ONGs y organizaciones realmente grandes y poderosas porque tienen herramientas mucho más grandes. Se pueden ver lugares donde han entrado y sabemos que el cambio es posible. Este tipo de organizaciones grandes, bien estructuradas y poderosas han demostrado ser esenciales en la lucha por los derechos civiles. También son muy importantes la concienciación con diferentes campañas alrededor de un individuo, del tú. Es algo que se puede convertir en el punto de cambio para un país entero. El mundo está cambiando lentamente y, muchas veces, sin vuelta atrás. Ante esto, es muy difícil no sentir cansancio o tristeza. No está mal sentir estas cosas, sigues siendo una persona. Tú solo eres una persona y tienes que saber que no todo el mundo podemos luchar en todo. No importa lo que estés haciendo porque hay otra gente que lo está intentando. Date un respiro para descansar y para empezar al día siguiente. No importa qué pieza del puzle decidas coger, es una pieza importante seguro. Y esto es lo mejor que puedo decir. Yo misma me siento realmente sobrepasada con esto, me siento realmente sola y sin ayuda. Cualquiera de nosotros puede servir de alguna manera y ser un más uno.
«¿Cómo ha logrado todo esto una chica de Kentucky?»
P.- ¿Qué podemos esperar de ‘Choose Love Tour’? ¿Qué ciudad estás más emocionada por visitar?
R.- El tour al completo es excitante. Son fechas increíbles las que vienen. Pero, por ejemplo, Glasgow es un sitio especial, mi sitio favorito para pinchar. Actuar ‘back to back’ con Mike Servito y pasar tiempo con él también es motivante. Al margen de la parte activista del tour, se trata de una lista de sitios que amo. Como el club Robert Johnson en Frankfurt, son lugares que guardan un espacio destacado en mi corazón. Estoy realmente encantada de poder visitar esos lugares pero, además, también hay programadas ciudades más pequeñas porque es importante asegurarte de actuar en clubs o espacios que sean accesibles para todo el mundo. Es una oportunidad de crear esa conexión especial con la gente.
P.- En tus actuaciones siempre tratas de dar visibilidad a la escena local invitando a artistas autóctonos. ¿Qué nos pueden avanzar respecto a esto en tus dos fechas previstas en España?
R.- Siempre intento, si el espacio me lo permite, trabajar con artistas y bailarines locales. Trato de no hacer solamente una fiesta si no, también, dar apoyo a la escena local de cada zona. Es algo así como dejar dinero en la mesa de los sitios que visitamos. No puedo dar muchos detalles porque todo esto lo llevan ‘ellos’. Y digo ellos con mayúsculas refiriéndome a la gente que está al control de mi vida…que no soy yo (risas).
P.- ¿Cuáles son tus inspiraciones musicales?
R.- Echando la mirada muy atrás, honestamente, mi padrastro. Él solía hacer estos remixes en cassettes para todos nosotros en la familia. Eran estas fantásticas ‘mixtapes’ que escuchábamos yendo al trabajo cuando él y mi madre salían. Él, a su manera, es muy buen DJ. Pienso que fue mi padrastro quien me expuso a todo esto. Hay muchas cosas que escuché, por primera vez, por él: Pet Shop boys, Waxmaster o New Order por ejemplo. Todas las cosas que escuche gracias a él forma parte, muy profundamente, de mi cerebro ahora como DJ. Cuando empecé a hacerme mayor, y empecé a ir a ‘raves’ y fiestas así tuve la suerte de poder ver a auténticas leyenda de la música house. También hay otros DJs que obviamente admiro: Derrick Carter, Paul Johnson o DJ Header, entre otros. Cuando ya empecé realmente a pinchar, fueron un par de personas quienes me transformaron mucho. es Como por ejemplo Mr. Scruff. Porque domina muchos estilos y me enseñó que puedes hacer un set con muchos estilos distintos: pasar del techno al jungle, o a lo que sea, y encontrar la manera de conectarlo todo. Aunque me llevó mucho tiempo llegar técnicamente a lo que el y muchos de su generación son capaces de hacer. Pero ahora que me hago mayor, hay un set de Mr. Scruff que, sin duda, cambió mi cerebro para siempre. Como productora, que es una vida totalmente diferente, pienso en DJ Snake, Cashmere, Thomas Bangalter y algunos de los discos que hizo con Daft Punk, y las claves que poseen y a las que suelo volver de vez en cuando.
P.- Hablando de tu faceta de productora: ¿cómo descubres música?
R.- Soy lo suficientemente afortunada como para estar en muchísimas listas de promoción. Así que escucho muchas cosas antes de que salgan a la luz. Se trata de un trabajo a jornada completa. Siempre intento llegar tan lejos como pueda escuchando novedades. Hay que tener todo descargado para escucharlo correctamente. Diría que, probablemente, cada semana escucho, fácilmente, 1.000 discos. Igual más. A veces, cuando me preparo para un show, puedo llegar a escuchar, en una sola noche, unos 750 discos. Para llevar a cabo esto tengo un sistema de clasificación. Mi tour manager me ayuda a organizar todo y a tener todos los archivos preparados para escuchar y poder saber qué escucho en cada momento para asegurarme de que todo el mundo tiene la respuesta que necesita. No hay que redundar en la escucha de nada, quiero escucharlo todo así que el proceso de clasificación y preparación está dirigido a hacerlo más eficientemente. Realmente, todo esto supone un trabajo a jornada más que completa independiente de mi faceta como DJ. Cada show que hago conlleva su tiempo de preparación previa. A veces intento preparar todas las actuaciones de un mismo fin de semana a la vez pero no siempre funciona porque, si los shows van a ser muy diferentes entre ellos, cada uno suele necesitar su tiempo independiente de preparación. Voy a los sitios con siete veces más música de la que necesito y es mi trabajo conocerla toda así que también conlleva un proceso de memorización con anotaciones sobre las canciones. ¡Es fascinante! (ríe ironicamente) No es fascinante para nada.
P.- A mi me parece fascinante
R.- ¿En serio? Chocante, porque durante el proceso de escucha, básicamente, soy yo haciendo ‘siguiente’, ‘¡oh! muy bonita’…(Puedes verlo en el vídeo que acompaña a esta entrevista: escenifica con onomatopeyas y muecas cómo es el proceso).
P.- ¿Qué sueños has hecho realidad en este tiempo?
R.- Esto es algo loco porque puedo recordar perfectamente los días en los que imaginaba ser capaz de venir a Europa a pinchar a un bar o algo. Me acuerdo de estar sentada en mi escritorio, en uno de mis tres trabajos parciales, y me imaginaba haciendo todo esto. Solía tener fantasías realmente muy detalladas: cómo sería entrar en el taxi, ir al aeropuerto… Lo tenía todo absolutamente mapeado en mi mente. Cómo sería formar parte de ‘Beats in Space’, un programa de radio fantástico. Cómo sería estar en el espacio de Pete Tong en Radio 1 de la BBC. Son todas las cosas en las que pensaba y ahora puedo hacer todo esto. ¡Tengo la opción de ir a Pete Tong en Radio 1! ¡Tengo que elegir el Essential Mix todas las semanas! Todas estas cosas…siguen explotándome la cabeza. Te imaginas oyendo tu nombre entre todos los efectos de la BBC o que reproduzcan tu remix o tu canción… ¡Y todo esto ha pasado ya!
Recuerdo la primera vez que llegue a París, la primera vez que estuve frente a Notre Dame, no lo podía creer. Es decir, antes de eso no tenía ni pasaporte. Sé que lo cuento mucho y no me gusta ser repetitiva pero no fue hace tanto tiempo. Lo veo más lejos de lo que realmente es pero todavía hay muchos momentos en los que pienso: «No me creo que una chica de Kentucky haya logrado todo esto». Desafía toda lógica. Todo eso que te cuento eran algo así como sueños rotos. No era tan joven cuando todo esto se ha convertido en realidad. Creo que significa que todo el mundo puede esperar que sus sueños se hagan realidad a cualquier edad. Ahora, eso sí, mi vida se ha llenado de nuevos sueños por cumplir.
P.- ¿Cuáles son esos sueños por cumplir?
R.- Ahora mis sueños han tomado otros derroteros. Antes solían ser una lista acotada de objetivos: quiero hacer esto, quiero estar en el programa de Pete Tong, quiero hacer lo otro… Eran maravillosos y siguen siéndolo. Pero ahora sueño con cosas más complejas de explicar: quiero ser capaz de cuidar de mi familia, me encantaría pasar más tiempo con mi marido o espero que este álbum llegue al público que quiero o que transmita lo que busco. Mis sueños se han vuelto, en un sentido, más simples pero, a la vez, más complejos. Sin duda, mis aspiraciones han cambiado mucho de lo que solían ser: quiero comprar una casa, quiero cuidar de mis padres, quiero tener hijos…
P.- Estos también son grandes sueños.
R.- Sí, sin duda lo son.
P.- ¿Cuál es tu primer recuerdo relacionado con la música?
R.- No te puedo decir si es un recuerdo o si mi mente ha fabricado este recuerdo en base a algo que me han contado. Pero soy yo, siendo un bebé señalando una radio con el dedo porque quería que la encendieran.
P.- ¿Y tu primer recuerdo relacionado con la música electrónica?
R.- Crecí en los años 80 así que había mucho de eso. Antes no se le llamaba así pero definitivamente lo era. Los primeros discos de Madonna, por ejemplo, que eran música dance y que acabaron convirtiéndola en una superestrella.
P.- ¿Crees que en el futuro un DJ podrá llegar a ser político o a ganar un premio como el Nobel? DJ Hell contestó a esta misma pregunta que los políticos del futuro habrán crecido con la música electrónica e, incluso, muchos de ellos habrán sido DJs.
R.- (Se ríe) Es una buena respuesta. Esto ya se empieza a ver, especialmente en Reino Unido donde muchos DJs tienen estudios superiores o, incluso, masters especializados y reputados. Pete Tong es uno de ellos. Definitivamente empiezas a ver artistas que están realizando contribuciones muy importantes a la historia de la música y de la Cultura. Algunos de ellos están más involucrados civilmente. No puedes restar importancia a una figura como, por ejemplo, la de Tong o cualquier otra persona que difunde y defiende la Cultura. Conforme el tiempo avanza esto se aprecia más. Ser DJ y pinchar es madurar culturalmente para la gente que está creciendo ahora, o incluso desde los años 50 o 60, y hay que entender que es algo importante. Somos muy afortunados de vivir esto porque, actualmente, hay cierta consistencia en la cultura de la música de baile. Se está estableciendo una normalización, se está convirtiendo en algo ‘mainstream’, en el buen sentido de la palabra
P.- Se puede decir que existen dos tipos de DJs: los comprometidos con la música y la técnica y los que solamente ofrecen fiesta y buscan el dinero o la fama. ¿Crees que el segundo grupo tiene que desaparecer para que la música electrónica tenga un futuro prometedor?
R.- El tiempo resolverá ese problema. En cualquier estilo de música, siempre habrá gente que intenta acaparar la atención con fuegos de artificio o lo que sea. Pero eso no dura para siempre. Todos los géneros musicales tienen ejemplos así. Pero, al final, las personas que perduran son gente como Carl Cox o Laurent Garnier, que sí son buenos de verdad. Esto solía volverme loca cuando era más joven y purista. Lo criticaba mucho y lo rechazaba vehementemente. Pero ahora me he moderado: es algo que sucede y, en definitiva como dice Cox, es una manera de hacer llegar la música de baile al público. Muchas personas llegan a este estilo música gracias a esos DJs menos comprometidos. Yo, por ejemplo, cuando empecé a escuchar música dance, escuchaba auténtica mala mierda.
P.- Tu relación con el local SmartBar de Chicago es bien conocida. Te convertiste en una pieza fundamental de ese local y se convirtió en una parte del germen de tu éxito. ¿Puedes describirlo en una sola palabra?
R.- Hogar. Pero no sólo para mí, sino para mucha gente. Lo realmente maravilloso de SmartBar es que, a lo largo de los años, muchas personas han establecido una relación preciosa con él. Son gente asidua a grandes festivales o fiestas pero que consideran a SmartBar un hogar. Incluso algunos de los DJs más grandes. Todos recuerdan la última vez que estuvieron en SmartBar.
P.- Ser DJ es un trabajo que implica, en la gran mayoría de los casos, pasar mucho tiempo viajando. ¿Cómo logras conciliar tu vida laboral con la personal?
R.- No estoy segura de que pueda contestarte a eso todavía. Lo hago lo mejor que puedo pero es una de las partes mas duras de esta profesión. Me encanta mi trabajo pero…no puedes llevar a tus padres, a tu marido o a tu perro. Soy una persona muy familiar y esto me cuesta. Ser DJ es fantástico pero, sin duda, vas a echar de menos a tu familia muchísimas veces.
Para más información acerca de la gira ‘Choose Love’ de The Black Madonna o para conocer más sobre la artista puedes visitar su página web oficial.