El presidente del Consejo Europeo desmiente dos veces a Sánchez: la conferencia de paz la propuso Egipto
España lo defendió como un logro diplomático de Sánchez
El éxito que España se atribuyó anoche, con la solicitud de una conferencia de paz entre Israel y Palestina en las conclusiones del debate del Consejo Europeo, no fue de Pedro Sánchez. Hasta en dos veces, en la rueda de prensa que ha ofrecido esta madrugada el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, el mandatario comunitario ha dejado claro que hubo un gran consenso con «la propuesta realizada por Abdalfutá Al Sisi» durante la cumbre que convocó él mismo en Egipto el pasado fin de semana. Fuentes del Gobierno aseguraban que había sido posible «gracias a liderazgo» y a la «capacidad de convencimiento» del presidente español. Extremo en el que seguían insistiendo casi a las dos de la madrugada, pese a las palabras de Michel.
La conferencia que quiere promover la Unión Europea, para relanzar el proceso de paz entre Israel y Palestina con la solución de dos Estados, fue propuesta en y por Egipto durante la cumbre de El Cairo y cuenta con «gran consenso» en la Unión Europea. Así lo ha señalado Michel, en contra de lo que estuvo vendiendo la delegación española durante toda la tarde-noche para justificar que Sánchez accediera a un acuerdo que bloqueó durante seis horas y que ni recogía sus términos de «alto al fuego humanitario» y distaba mucho de ello.
Fuentes gubernamentales celebraban, como contrapartida, que el presidente del Gobierno en funciones había logrado colar su propuesta de conferencia de paz que ahora resulta no ser suya. Aunque su equipo la aprovechase para insinuar, incluso, que la actitud del presidente español había hecho cambiar de opinión al secretario de Estado de los EEUU Anthoni Blinken.
Charles Michel sí que ha confirmado que hubo un «gran consenso» entre los dirigentes comunitarios durante la cumbre europea para trabajar «activamente» para hacer posible «muy pronto» una conferencia de paz internacional liderada por la UE. Sánchez, horas antes, volvió a insistir en la capital comunitaria con esta propuesta que, desde España, rechazaba la embajadora en España del Estado de Israel por considerar que no era el momento de celebrarla. Fuentes de Moncloa, en Bruselas, admitían simultáneamente que «no debe celebrarse necesariamente en nuestro país». Unas palabras que ahora cobran importancia con el doble desmentido de Michel a Sánchez.
«El presidente egipcio, Abdelfatá al Sisi, propuso mantener una conferencia en seis meses. Fue puesto sobre la mesa por él y significa que tenemos que estar en contacto con todos los actores de la región y no solo para coordinar los esfuerzos», señaló de madrugada en rueda de prensa tras la primera jornada del Consejo Europeo. La única diferencia entre la conferencia de paz propuesta por al Sisi y la que Sánchez dice haber liderado, explican fuentes comunitarias, es que el formato que busca ahora la UE aspira a ser más inclusivo que el de Egipto y lograr sentar a Israel y Palestina en la misma mesa para relanzar el proceso de paz.
El ex primer ministro belga subrayó la necesidad de que la UE «juegue un papel fuerte y positivo» y considera que organizar «muy pronto» una conferencia de paz es la forma de «sostener la paz y la estabilidad en la región». Michel defendió que la UE mantenga una ambigüedad sobre el formato para abrir el abanico de actores que participen en la cumbre y empujar la iniciativa. «No queremos ser precisos porque queremos tener contacto con las partes», manifestó.
«Esperamos que en semanas y meses tengamos progreso y para eso tenemos que discutir los detalles con todos los posibles socios para hacer que suceda y sea exitosa. Si queremos lanzar el proceso de paz no podemos anticipar el formato», ha indicado, si bien ha dejado claro que Hamás no se sentaría en la mesa y no tendría un papel en la conferencia.
Sánchez había llegado a la cumbre europea con la propuesta de una conferencia de paz «en seis meses» para impulsar el reconocimiento de Palestina, y desde la delegación española vendió como un éxito diplomático de España la inclusión de esta demanda en las conclusiones de la cumbre.
La declaración de los líderes de los Veintisiete pone el énfasis en reavivar el proceso político para la solución de dos Estados y agradeció las iniciativas diplomáticas en este sentido, señalando su apoyo a organizar una «conferencia de paz internacional pronto». Aunque de las palabras de Michel se desprende que ya había un gran consenso previo y que el esfuerzo no fue tal.