La Policía británica descarta que el atentado de Londres tenga vínculos directos con el Daesh
La Policía y los servicios secretos británicos no han hallado ninguna prueba de que el atentado del pasado viernes en el Metro de Londres fuera perpetrado, ordenado u organizado por ningún grupo armado concreto, según fuentes británicas y estadounidenses cercanas a la investigación.
Las fuerzas de seguridad han detenido a dos hombres tras la explosión del cubo bomba en la estación de Parsons Green en la que resultaron heridas 30 personas. La bomba no detonó todo su material explosivo.
La agencia de noticias del Estado Islámico, Amaq, reivindicó el atentado, pero este lunes hasta cinco fuentes británicas y estadounidenses han apuntado en contacto con Reuters a que sería un atentado «inspirado» y no perpetrado por el grupo yihadista, ya que hasta el momento no se ha encontrado prueba alguna de conexión directa entre el atentado y el Estado Islámico. «No me parece una trama dirigida desde el centro», ha apuntado una de las fuentes en declaraciones bajo condición de anonimato.
La Policía está interrogando a un joven de 18 años detenido el sábado cuando pretendía salir de Reino Unido a través del puerto de Dover. Otro sospechoso –de 21 años– fue arrestado pocas horas después en el barrio londinense de Hounslow. El primero sería un iraquí huérfano llegado como refugiado a Reino Unido con 15 años y el segundo, un sirio que llevaba varios años viviendo en el país.
Además, ha sido registrado un inmueble en Sunbury, al norte de Londres. La casa pertenecería a una pareja que acogió a cientos de menores, algunos de ellos refugiados.