¿Cómo se hace?
Mediciones

Los pasos para leer correctamente las mediciones en una jeringa

Uno de los grandes errores que se cometen en la manipulación de jeringas es creer que basta con echar un vistazo a las líneas que aparecen en el cilindro de éstas. Resulta que hay ciertos secretos que deberías saber si quieres usarlas de la forma más adecuada. Vamos a enseñarte cómo leer correctamente las mediciones en la jeringa para que no te quede ninguna duda al respecto.

La clave está en que existen diversos tipos de tales elementos, por lo que no podemos considerarlas todas exactamente del mismo modo. Muchas de ellas no utilizan los estándares clásicos de medición, en ml, y eso puede hacer que el proceso de lectura sea algo difícil.

¿Cómo leer correctamente las mediciones en una jeringa?

La primera recomendación es que siempre mires al menos dos veces la jeringa para evitar los errores y confusiones en la lectura. Atendiendo a la marca del producto y sus indicaciones, sabrás qué sistema de medición adoptan y cuántas unidades representa. Generalmente, las líneas transversales en el cilindro señalan una cantidad establecida de milímetros o fracciones de milímetros.

Hay jeringas, como las que sirven para medir la insulina, que tienen líneas relacionadas con las unidades pero no con milímetros. Algunas antiguas también se diferencian de las modernas porque no recurren a la medición en milímetros sino a otras distintas.

Lo normal es que la mayoría de ellas tenga líneas en los 2ml, 4ml y 6ml. Líneas más largas atravesadas por líneas más cortas, asociadas cada una de éstas a los números impares entre esos números pares o a fracciones más pequeñas que los milímetros.

Las jeringas grandes pueden tener líneas predeterminadas por cada 5ml de contenido. De nuevo, con líneas cortas para fraccionar.

¿Y cómo extraer la sustancia con una jeringa?

Independientemente de cuál vaya a ser el compuesto que extraigas, debes sostener la jeringa por el anillo que hace de soporte. Evitando que tus dedos interfieran con el proceso, tira de la jeringa hasta llenarla con la sustancia y la cantidad que necesites.

Luego, hay otras advertencias que deberías recordar; como el no realizar las mediciones en unidades que difieren de aquellas que debes obtener. Hacer la conversión puede ser complicado; y emplear una cantidad menor o mayor a la que requieres, puede tener más o menos riesgo.

Si sigues estos consejos, probablemente no tendrás problemas graves para hacer una medición exacta de la sustancia a obtener.