Historia de la música

Historia de la música: 4 compositores clásicos que deberías conocer

vivaldi-historia--musica (1)
Antonio Vivaldi

La historia de la música está llena de grandes compositores, tanto clásicos como contemporáneos. Existen una decena de creadores clásicos que todos deberíamos escuchar al menos una vez en la vida, ya que sentaron todas las bases de la creación musical a lo largo de la historia.

Hoy os vamos a presentar a cuatro de ellos, muy conocidos, pero no por ello menos admirables. Algunos con vidas tan tormentosas y turbulentas como si de estrellas del rock se trataran, cada uno de ellos fue importante en sus aportaciones a la historia de la música, dejando un legado único de buenas obras clásicas para escuchar.

Antonio Vivaldi

Vivaldi, como casi todos los compositores clásicos de su generación, no solo fue un prodigio en el campo de lo musical. El compositor también fue sobresaliente en otras facetas como la de profesor o empresario. Con una melena roja, era apodado «il prete rosso» (el cura rojo) por su labor como sacerdote. Compuso unas 770 obras, entre las ¡que destacan sus conciertos para violín y orquesta de Las Cuatro Estaciones.

Antonio Vivaldi nació en Venecia en 1678. Poco se sabe de sus orígenes familiares, salvo que era una familia católica. Tuvo cinco hermanos, y en edad muy temprana comenzó a tocar el violín. Con 24 años ya era un experto violinista y ya había escrito algunas obras litúrgicas muy importantes.

Con 15 años se dispuso a estudiar para ser sacerdote, labor que fue altamente reconocida cuando en 1703, a la edad de 25 años, fue ungido sacerdote.

Alrededor de 1721, Antonio Vivaldi compuso su obra más famosa, Las Cuatro Estaciones. Se trataba de cuatro conciertos para violín que correspondían cada uno a una estación del año. Tres de ellos fueron de composición propia, y la Primavera, fue tomada en partes de su obra sinfónica Il Gustino.

Murió en Viena el 28 de julio de 1741.

vivaldi-historia--musica (1)

Ludwig van Beethoven

La vida de Beethoven no fue tan correcta como la Vivaldi. Nació en 1770 en Bonn, ciudad al este de Alemania. Se considera el último gran compositor clásico de la escuela vienesa, aprendiendo de uno de sus maestros como fue Mozart.

Se le considera un genio de la historia de la música clásica después de crear cinco conciertos para piano y orquesta, más de 30 sonatas y varias óperas, además de sus nueve famosas sinfonías. 

A pesar de que su padre era un hombre violento y enganchado al alcohol, Beethoven fue un niño prodigio desde muy temprana edad. Su obstinado padre fue uno de los causantes de que su hijo se convirtiera en la sombra de Mozart, después de haber demostrado su destreza para la música desde pequeño.

Su personalidad se fraguo encerrado entre cuatro paredes, obligado por su padre y, a pesar de ser sordo de un oído, consiguió ser un creador excepcional. Con todo esto, la personalidad de Beethoven era explosiva, llegando  a destrozar las casas en las que vivía después de sus ataques de ira.

Wolfgang Amadeus Mozart

El vienés nacido en Salzburgo en 1756, siempre ha sido considerado como uno de los grandes genios y más influyentes creadores de la historia de la música. Con tan solo cinco años ya componía sus primeras obras, demostrando un talento inaudito desde muy temprana edad.

Mozart tenía la capacidad de aprender de otros músicos y superarlos con su talento innato, siendo de lejos uno de los mejores compositores clásicos que se recuerda. Siempre quedará la leyenda de su competencia con Antonio Salieri, otro de los compositores de la época que siempre estuvo bajo la sombra de Mozart.

La película ‘Amadeus’ muestra con bastante cercanía la figura de este compositor inmortal a lo largo de la historia.

Frédéric Chopin

Uno de los más virtuosos pianistas que ha dado la historia de la música. Al polaco Chopin se le sitúa dentro de los grandes clásicos como Mozart o Beethoven, a pesar de que su vida no fue un campo de rosas.

Fue uno de los máximos representantes del romanticismo clásico con obras tan absorbentes como el Concierto para piano y orquesta n.º 2 Op. 21 en fa menor (1829-30) y el Concierto para piano y orquesta n.º 1 Op. 11 en mi menor (1830), obras de una enorme delicadeza y finura, alabadas por los compositores de todo el mundo.

Con esto, se dice que tenía un carácter difícil, que se comportaba como un tirano con sus alumnos cuando estos fallaban una nota, y le gustaba frecuentar los prostíbulos y las relaciones tormentosas. 

Lo último en Historia

Últimas noticias