Santi Millán confiesa que su padre murió hace unas semanas por COVID-19

Aunque la situación comienza a mejorar, la crisis sanitaria que atraviesa nuestro país y el resto de países del mundo sigue siendo preocupante. El riesgo de contagios sigue siendo alto y el hecho de que aún no exista ninguna vacuna para combatir el COVID 19 sigue alimentando la pesadilla que comenzó hace ya más de un mes y que desembocó en la situación en la que nos encontramos ahora. Un día más, encerrados en nuestras casas, nos proponemos llevar de la mejor de las maneras la alarmante situación que ya ha dejado miles de víctimas en nuestro país, entre ellas el padre de Santi Millán.

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Gracias Santi por esta maravillosa charla, por las risas, por tu optimismo a pesar de lo que has pasado y… por desvelarnos algo de Eduardo Zaplana que no sé si queríamos saber @santimillan

A post shared by Irene Junquera (@irenejunquera) on Apr 27, 2020 at 2:26am PDT

El duro momento que está atravesando el actor es el vivo reflejo de la situación que están pasando muchas personas durante estos días. No solamente por hacer frente a ese aislamiento social, sino que se han visto obligados a despedir en la distancia a algún familiar.

Al parecer, la triste noticia no ha tenido lugar recientemente ya que según ha afirmado el propio Santi Millán durante una entrevista en Instagram con Irene Junquera, todo sucedió hace algunas semanas. “Mi padre murió hace dos o tres semanas por COVID 19, por coronavirus. Por eso te digo, la situación no es fácil, es muy complicada. Por lo demás, mi familia está bien y tirando para adelante. Por suerte, tengo a mi madre cerca y podemos acompañarla en este momento” ha asegurado el actor.

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Hay gente que confunde el sentido del humor con la falta de seriedad. Seguramente son los mismos que piensan que llevar un traje les hace mejores. Tú qué crees @robertolealg ? @DOCKERSEUROPE #YOUDONTNEEDASUIT

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A pesar de las duras circunstancias, el presentador de ‘Got Talent’ intenta sobrellevarlo de la mejor forma posible intentando ver el lado positivo. “Tenía 81 años y ya tenía su vida hecha. Yo creo que hay un momento, prolongar la vida de forma artificial no es bueno… la gente debería poder morir con dignidad” ha continuado diciendo acerca de la muerte de su padre con cierto tono de resignación.