Tenso rifirrafe entre el juez del Supremo y Ábalos: «No me interrumpa, esto no es el Congreso»
El encontronazo se ha producido cuando el ex ministro ha tratado de explicar la renuncia a su abogado
Ábalos contesta al juez que el "fraude de ley" sería renunciar a su acta de diputado como le pedía su ex letrado

La declaración del ex ministro de Transportes José Luis Ábalos este miércoles ha dejado un momento de fuerte tensión cuando el magistrado del Tribunal Supremo que instruye la trama PSOE, Leopoldo Puente, le ha repetido hasta por tres veces: «No me interrumpa», según ha podido saber OKDIARIO de fuentes jurídicas. «Esto no es el Congreso», le ha llegado a decir el juez en un choque que ha durado alrededor de cinco minutos, apuntan las mismas fuentes.
El ex ministro ha señalado que se siente «indefenso» al considerar que en realidad no contaba con asistencia letrada, ya que el lunes intentó renunciar a su abogado, José Aníbal Álvarez, alegando que tenían «diferencias irreconducibles». El instructor, Leopoldo Puente, no se lo permitió apreciando un «fraude de ley» y le impuso venir a la cita de este miércoles con su letrado habitual y, si así lo considera, hacer después el cambio.
Ha sido en este momento en que Ábalos ha tratado de explicar por qué renunció a última hora a su abogado, cuando se ha producido el encontronazo. Leopoldo Puente ha pedido al ex secretario de Organización del PSOE que no le interrumpa y le ha espetado: «Esto no es el Congreso», le ha dicho al todavía diputado del Grupo Mixto.
Ábalos ha contestado al magistrado que «fraude de ley» sería renunciar a su acta de diputado, como le pedía su anterior letrado para que la causa quedase en manos del magistrado de la Audiencia Nacional que investiga otra de las derivadas del caso Koldo.
En esta ocasión, la Fiscalía Anticorrupción ha trasladado al Tribunal Supremo que aunque ve riesgo de fuga en el ex ministro José Luis Ábalos, no considera pertinente reclamar su ingreso en prisión provisional toda vez que es diputado del Congreso.
Por su parte, las acusaciones populares lideradas por el PP sí han solicitado que se envíe al ex titular de Transportes a la cárcel o que se le imponga una fianza de 650.000 euros tras el último informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil que revela «ingresos irregulares».
En esta ocasión, Ábalos se ha acogido a su derecho a no declarar ante el instructor del Tribunal Supremo. Una decisión que supone un cambio de estrategia respecto a la línea de defensa seguida hasta ahora, rechazando así dar explicación alguna sobre los «ingresos irregulares» de origen desconocido que han aflorado con las pesquisas. El ex dirigente socialista ha llegado en solitario -sin la compañía de José Aníbal Álvarez- a la sede del Alto Tribunal.
El PP pide prisión pero no en Soto
Por su parte, el PP, que encabeza la acusación popular, ha solicitado fianza de 650.000 euros para Ábalos y su ingreso prisión en un centro penitenciario distinto al de Soto del Real (Madrid) para no coincidir allí con Santos Cerdán, su sucesor al frente de la secretaría de Organización del PSOE.
En la misma vista, la defensa de Ábalos se ha opuesto a la petición de las acusaciones populares, alegando que se trata de una reclamación que a su juicio tiene una finalidad «política».
Hasta ahora, esta medida restrictiva de libertad solo ha prosperado con Santos Cerdán, que se encuentra en prisión provisional desde el pasado 30 de junio por su presunto «papel principal» en la trama de amaño de obras.
Esta nueva comparecencia en el Supremo ha tenido lugar después de que la UCO detectara 95.437,33 euros desembolsados por Ábalos sin justificación bancaria, entre los que destacaba 20.799,40 euros de gastos «personales» con cargo a «una fuente de ingresos no declarada».
Además, la Guarda Civil reflejó que el PSOE pagó a Ábalos con dinero en efectivo mediante sobres. Algunos de esos pagos, explicó, tenían respaldo documental en lo aportado por el Partido Socialista como compensación por gastos, pero otros no, apuntando así a una presunta contabilidad B de Ferraz.