Sánchez reduce el ‘caso Salazar’ a un simple «error de velocidad» pese a no hacer nada durante 5 meses
Salazar fue denunciado por varias mujeres que trabajaron para él en La Moncloa
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha reducido el escándalo del que fuera su estrecho colaborador, Paco Salazar, denunciado por acoso sexual por varias trabajadoras que estuvieron a su cargo en La Moncloa a un «error en la velocidad de tramitación de las denuncias». Así se ha expresado este sábado el líder socialista en el Congreso de los Diputados durante la celebración del Día de la Constitución.
El líder socialista ha asegurado que el caso que afecta a quien estuvo a punto de convertirse en el segundo hombre más importante del PSOE «se ha gestionado muy mal».
Sánchez ha insistido en que el PSOE «es un partido feminista» y que la situación que se ha vivido con el que fue miembro de la Comisión Ejecutiva Federal es un «error en la velocidad de la tramitación».
El presidente del Gobierno ha admitido que su partido debe «reforzar en recursos humanos» para mejorar el protocolo de actuación ante situaciones de acoso. «Yo asumo el error en primera persona», ha manifestado el jefe de filas socialista.
Aun así, ha matizado que no se trata de «un error buscado» y que «se le retiraron responsabilidades» en cuanto se supo de la existencia de las denuncias por acoso sexual.
En todo caso, el secretario general del PSOE ha admitido que el proceso de denuncia de acoso «se ha dilatado de manera no necesaria», pero considera que están «en plazo» para «reforzar este órgano».
Sánchez se enteró por la prensa
Sánchez aseguró que «no se recibió denuncia en La Moncloa ni en PSOE». El líder socialista ha detallado que es un «órgano que actúa con autonomía, independencia y confidencialidad» y, por tanto, no le transmitía a él ese tipo de denuncias. «Conocí el estado del expediente por la prensa», ha indicado el jefe del Ejecutivo. Y ha llamado a respetar la autonomía de ese órgano: «No es falta de sensibilidad ni de compromiso».
A su vez, niega que se hayan intentado ocultar las denuncias y ha subrayado que «se han tomado medidas», entre las que se ha señalado que «se ha puesto en marcha un expediente». Aun así insiste en un «fallo en la interacción». Además, ha asegurado «no aceptar lecciones de partidos que no hacen ni el 10%» de lo que cree que hace el PSOE.
El escándalo de Paco Salazar estalló apenas unas horas antes de que el político sevillano fuera nombrado nuevo secretario de Organización del PSOE en sustitución de Santos Cerdán, entonces en prisión preventiva, después de que éste ocupara el lugar de José Luis Ábalos, ahora también entre rejas.
El medio eldiario.es publicó los testimonios de varias mujeres que aseguraron ser víctimas de acoso sexual por parte de Salazar. Todo ello provocó su renuncia como miembro de la Comisión Ejecutiva.
La denuncia de una trabajadora de La Moncloa bajo las órdenes de Paco Salazar relataba cómo el político socialista le habría realizado comentarios obscenos sobre su vestimenta y su cuerpo, mensajes intempestivos con invitaciones para cenar a solas fuera del horario laboral o incluso ofrecimientos de quedarse a dormir en casa.