Podemos ya no quiere ‘muertos’ a los abuelos y agita las pensiones para montar «un 15-M de los del pelo gris»
El PP es el partido al que votan mayoritariamente los mayores de 65 años. Los españoles en esa franja de la vida son, a la vez, quienes menos confían en Podemos. Lo explicó Carolina Bescansa en su día: «Si en España sólo votase la gente menor de 45 años, Iglesias ya sería presidente del Gobierno». Así que, coincidiendo con su hundimiento en las encuestas, la formación morada ha decidido agitar a los pensionistas para pescar a río revuelto en un caladero hostil a las propuestas de Podemos.
La realidad demográfica española propicia que no sean los jóvenes, sino los mayores, quienes elijan al inquilino de la Moncloa. El PP aventaja en 14 puntos al PSOE entre los mayores de 65 años: obtuvo el 37,7% de los votos de los pensionistas en las elecciones del 26J. De celebrarse hoy elecciones, Podemos apenas conseguiría el 3,5 % de los votos en esta franja generacional. Los de Pablo Iglesias han sido superados por Ciudadanos, que según el último CIS, ya logran el 13,2 % de los votantes más mayores.
Toda la oposición está interesada en minar la fuerza del PP entre los españoles que peinan canas. Los intereses de PSOE, Podemos y Ciudadanos confluyen y así es como la subida de las pensiones se ha convertido en reivindicación en la calle. Hay casi nueve millones de españoles que viven de una pensión.
Podemos está intentando capitalizar la protesta en la calle. «Si los abuelos toman las calles, España va a liderar el siglo XXI en Europa», han escrito sus líderes en las redes sociales. Los de Iglesias creen que ha llegado el momento de seducir a un colectivo social que hasta ahora les ha dado la espalda.
Si los abuelos y abuelas han llegado a los leones de las Cortes igual terminan la tarea de la Transición y ponen al PP en donde pertenece: el basurero de la historia. https://t.co/AmxStH4yiI
— Juan Carlos Monedero (@MonederoJC) 24 de febrero de 2018
El giro de los morados es llamativo. Hasta ahora, la pirámide demográfica servía a los de Iglesias para justificar sus derrotas electorales. «Lo de los abuelos nos desespera», le confesó Iglesias al periodista Enric Juliana en una entrevista en La Tuerka.
Mucho peor fue la reacción ya no sólo de los dirigentes de Podemos, sino de sus propias bases tras la debacle electoral del 26J. La victoria del PP, logrando más votos y más escaños, escoció en las filas comunistas. Las redes se inundaron de mensajes como este: “Que se mueran los viejos que votan al PP”.
A la vista de que el envejecimiento progresivo de la población es algo imparable en el corto y medio plazo, y de que, por tanto, los pensionistas seguirán aumentando su influencia sobre cualquier resultado electoral, Podemos ha preferido cambiar de estrategia: ahora busca la seducción de ‘los viejos’ con el señuelo de que las pensiones subirían más de lo que permite el Gobierno si Mariano Rajoy no estuviera en la Moncloa.
Y ha decidido sacarles a la calle para ver si moviliza «un 15-M de los del pelo gris» que termine confluyendo con las reivindicaciones de los jóvenes. «Los jubilados han necesitado su tiempo, pero se han dado cuenta […] de que de nada sirve mejorar unos euros al mes si sus hijos y sus nietos siguen sin empleo y sin vivienda», ha escrito el ideólogo de Podemos, Juan Carlos Monedero.