Pedro Sánchez: «Me iría a tomar una cerveza con Esperanza Aguirre»

El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, no deja de sorprender. Tras calificar a Rajoy de «una persona afable» en las distancias cortas; añade que se iría a tomar unas cervezas con Esperanza Aguirre. «Me dice: yo tengo unas piernas muy bonitas. Se lo dice todo ella», indicó Sánchez.

Tras una llamada a Sálvame, su paso por El Hormiguero y el programa de Jesús Calleja entre otros; Sánchez entra hasta en la cocina de Bertín Osborne para volver a mostrar su lado más humano. «Creo que el próximo líder de la oposición será Soraya (Sáenz de Santamaría). Yo jubilaría a Rajoy», contestaba ávido Sánchez.

Si hasta el momento conocíamos su faceta de padre y marido, deportista (amante del baloncesto) y cercano; ahora cuenta que fue breaker, que se relaja haciendo caricaturas y antes de conocer a su mujer era un ligón empedernido. Admite que hasta los 31 años no sentó cabeza con su actual mujer, Begoña, y que su primera novia fue una italiana cuando tenía 14 años: «Por aquellos años yo era un breaker, que vestía con ropas anchas y cordones fluorescentes. Vivía cerca de la plaza de Azca (situada en Madrid) y allí íbamos a picarnos a bailar. El breakdance se me daba muy bien», reconoce Sánchez. Pero si hay algo que relaja, admite, es pintar. «Hago caricaturas y se me da muy bien», presume.

La calidez que le da Bertín Osborne en el sofá de su casa hace que Sánchez comience a contar las anécdotas o historias personales que en otros programas no había contado. Por ejemplo, algunos medios y ciudadanos lo conocen por el político de camisa blanca y Sánchez le desvela a Bertín: «Cuando me presenté para ser secretario general estaba siempre de viaje y no me podía comprar camisas, así que le pedí dos a mi hermano y me las dio blancas. Me las llega a dar azules y hubiera ido igual. Fue casualidad», dice entre risas.

«Hacer la mili fue una pérdida de tiempo»

Cuando le preguntan por la faceta de guapo, siempre se la quiere quitar de un plumazo: «Eso me lo llaman los medios de comunicación pero he llegado a donde estoy porque me lo he currado», recuerda. ¿Qué sueños tenía Pedro Sánchez antes de ser Secretario General del PSOE? «He tenido la gran suerte de cumplir las tres facetas profesionales en mi vida. El baloncesto, de pequeño le dedicaba 4 o 5 horas al día; la segunda como profesor universitario dando clases de estructura Económica y la tercera como político», contesta.

Para Pedro Sánchez hacer la mili fue una auténtica «pérdida de tiempo». «Hice la mili en el Servicio Geográfico del Ejército en Campamento. En Cáceres coincidí con Alfonso de Zurita, sobrino del Rey. La verdad es que la mili no me aportó nada. No me aportó nada, fue una perdida de tiempo», desvela.

Una vez ‘entrados en harina’ y hablando de política Sánchez pregunta: «¿No será más que lo bueno o lo viejo, la buena política la que tenemos que aprovechar?», algo que interesa a Bertín. Desde sus inicios como secretario general, Sánchez siempre se ha vendido como «lo nuevo», «la regeneración» o «savia nueva» del partido socialista.

«¿Te ha hecho daño la corrupción?»

Hablando sobre actualidad, los atentados de París, el socialista explica que se enteró de la trágica noticia por el ministro francés Manuel Valls. «Me llamó sobre las 10 y yo estaba viendo la televisión con mi mujer. Me comunicó casi en tiempo real que habían sucedido unos atentados y que al día siguiente no podría venir a un congreso que el partido había organizado en Madrid».

«Los profesores en España también sacaron a los niños al recreo para hacer un minuto de silencio, y entonces mi hija me preguntó más tarde: ¿Pero los papás de los terroristas se sienten orgullosos de ellos? Fue terrible», recuerda Sánchez. «Los terroristas quieren cambiar nuestros hábitos y tenemos que seguir haciendo vida normal. Los partidos en esto estamos unidos», reitera.

Pero la pregunta que podríamos denominar ‘del millón’ sería la misma que le han hecho cientos de veces al presidente Mariano Rajoy: «¿Te ha hecho daño la corrupción?» El socialista respondió: «Soy un político nuevo que dirige un partido histórico y tiene muchos alcaldes y alcaldesas… y alguna oveja negra tiene pero tiene que quedar claro que es un partido honesto. No hay partidos corruptos, sino personas corruptas. Hay que terminar con la impunidad, por eso hemos llevamos medidas en nuestro programa para terminar con ella», asegura.

Del sofá y las fotos intercaladas de su juventud, mujer, hijas y recientes pasamos a la cocina donde Sánchez muy mañoso, o al menos más que Bertín, se puso a exprimir zumo. En esta ocasión ambos se intercambiaron papeles y fue Pedro quien pregunto a Bertín todo el tiempo. El cantante también habló de su vida hasta coincidir en que les encantaba el picante y le hizo probar al político su pócima mágica: la cerveza con tabasco. «Ya se la he ofrecido a una empresa a ver si la comercializa», desveló Bertín. Pero la cara de Pedro no fue agradable al aprobarla. Terminaron jugando al ping-pong con la conclusión de Bertín: «Hoy me lo he pasado mejor de lo que esperaba. El Pedro dialogante que presume de talante»