Gobierno de España

Montero gasta 60.000 € en limpiar las «lámparas de estilo» de Hacienda para lograr un «aspecto impecable»

María Jesús Montero confesó vivir allí y dos de las lámparas están en la "zona ministra"

Prevé hacer la limpieza molestando lo menos posibles: durante dos semanas de agosto

Montero lámparas
Rafael Molina

El Ministerio de Hacienda de María Jesús Montero gastará casi 60.000 euros en la «limpieza de lámparas de estilo en la sede central del Ministerio de Hacienda» para garantizar que mantienen un «aspecto impecable». Son 56 piezas de diferentes materiales, aunque la mayoría están hechas de cristal y bronce dorado. Varias de ellas están en lo que se define como «zona ministra». La también vicepresidenta primera confesó que reside en la sede de su cartera y, por tanto, convive con estos objetos.

La Oficialía Mayor del Ministerio de Hacienda ha licitado un contrato para el «servicio de limpieza de lámparas de estilo en la sede central del Ministerio», situada en la céntrica calle Alcalá de la capital de España. Este acuerdo tiene una duración prevista de hasta cinco años, prórrogas incluidas.

La memoria justificativa del contrato recoge que el servicio es necesario para «garantizar el mantenimiento óptimo de la iluminación y estado general de funcionamiento, así como su adecuada conservación y aspecto impecable». El Ministerio pretende que la pulcritud de estos objetos se adecúen al «uso y funciones decorativas que estas deben cumplir en actos institucionales y visitas públicas».

En el pliego de prescripciones técnicas del contrato, se asegura que es necesario «eliminar el polvo y la suciedad acumulados a lo largo del año». Para ello, se exige la utilización de unas «máquinas especiales que eviten el movimiento de las lámparas» e incluso el «contacto físico» con los objetos. En definitiva, busca el máximo cuidado para garantizar que no hay «roturas de cristal» ni «deterioros».

Además, incide en que emplearán los productos «del más alto nivel de eficacia» y «no abrasivos». También que deberán ser «específicos para cristal y bronce dorado».

Lámparas en la «zona ministra»

Dos de las «lámparas de estilo» se ubican en lo que Hacienda ha venido a denominar «zona ministro/a». La propia María Jesús Montero confesó en una entrevista en La Sexta que vivía en la sede del Ministerio, una planta encima de su despacho: «Se puede llamar piso, pero es una zona».

«He llevado mi ropa y mis objetos personales, pero no he cambiado nada de la decoración», indicó. Además, reconoció que mantiene la pompa del edificio: «Estoy rodeada de Borbones, porque en el Ministerio están las obras de El Prado, la Real Casa de Aduanas, que es el propio Ministerio».

El servicio de limpieza tiene un coste anual de 12.095,16 euros, con impuestos incluidos. En total, Hacienda prevé un valor estimado del contrato, incluyendo las modificaciones previstas, así como las eventuales prórrogas, de 59.976 euros. Es decir, que con IVA incluido, podría elevarse hasta los 72.570,96 euros.

Procedimiento de limpieza detallado

El Ministerio detalla hasta el extremo el procedimiento de este servicio. Expone que los pasos deberán ser:

  1. Tapar los casquillos de las lámparas. Este paso evitará «la entrada de líquido en su interior».
  2. Una piscina bajo la lámpara. Se colocará una superficie a modo de paraguas que «cubra el diámetro de la lámpara para evitar pérdidas de líquido».
  3. Proteger el resto de mobiliarios. Exige usar «tela impermeabilizante» para evitar que sufren daños.
  4. Uso de escaleras telescópicas antideslizantes o andamios. Para acceder a las lámparas.
  5. Comprobación del estado final. Los trabajadores tendrán que recoger los elementos utilizados y comprobar que «la lámpara esté en perfecto estado».

Además, la exigencia del contrato lleva al Ministerio de María Jesús Montero a exigir al adjudicatario que, en caso de «cualquier daño causado a las lámparas o sus componentes por una inadecuada realización de las labores de limpieza o la utilización de productos corrosivos», éste «será asumido por el contratista».

Por último, aclara que los trabajos deberán realizarse durante las semanas que, usualmente, suelen ser vacacionales en el calendario político: durante la segunda y la tercera semana de agosto.

Lo último en España

Últimas noticias