Iglesias puentea a Sánchez para regular por ley «la educación sexual» de los niños españoles
Podemos registra su iniciativa para instar al Gobierno a impulsar la educación sexual integral "en todos los niveles educativos obligatorios"
Podemos quiere convertir la lucha por la igualdad y contra la violencia de género en su principal bandera en el Gobierno socialcomunista. El partido de Pablo Iglesias ha ‘asumido’ competencias en Educación -cartera que dirige la socialista Isabel Celaá- para plantear en el Congreso la regulación de la «educación sexual» en todas las etapas del sistema educativo. Una medida de impacto en la opinión pública en la que Iglesias asume la iniciativa.
Lo hace a través de una Proposición no de Ley ‘para una educación sexual integral respetuosa con la diversidad sexual’. Este tipo de iniciativas no tiene poder legislativo, pero sí simbólico, ya que fija la postura de los grupos en relación a un asunto e insta al Ejecutivo a realizar alguna acción concreta. En este caso, impulsar las medidas legislativas «para la incorporación de la educación sexual integral en todos los niveles educativos obligatorios». Con ello, Podemos asume el protagonismo en una medida también reivindicada por Sánchez y que, de hecho, el Ministerio de Educación piensa incluir en la futura reforma educativa.
En la proposición, Podemos reclama al Gobierno la obligación de que los centros apliquen un «currículum integral con perspectiva de género» y que el profesorado tenga «la necesaria formación en materia de educación sexual integral». Asimismo, se impulsarán «materiales específicos» y «adaptados a las diferentes etapas educativas».
Ese concepto «integral» no se limita a las escuelas. Pide también programas destinados a involucrar, no sólo a la comunidad educativa, sino a «las familias» o «profesionales sociales y sanitarios», un ámbito en el que podrían entrar competencias de la vicepresidencia social del propio Iglesias.
Además, sostienen en su iniciativa, se «facilitará que todas las medidas educativas, tanto formales como no formales, contemplen como medida transversal» la atención a los colectivos LGTBI.
Según Podemos, pese a que España «se ha convertido en referente de las movilizaciones» del 8 de marzo (Día de la Mujer) «que atraviesan fronteras» existe, sin embargo, una «educación desactualizada».
Contra el «enfoque heterosexual»
Así, destacan que «el Eurobarómetro (2015) suspende a España en educación sexual, sensibilización de la población y empoderamiento de las mujeres» y opinan que, pese a que la Ley de Salud Sexual (2010) obliga a los poderes públicos a desarrollar acciones formativas, «esto no se cumple en todas las escuelas por igual».
En este punto, comparten que «la educación sexual sólo en algunos casos es impartida en el contexto formal por parte de algunos profesores durante las horas asignadas a la tutoría, quedando delegada la responsabilidad a cada centro y dependiendo del interés y voluntad del profesorado el enfoque y los contenidos abordados».
Se queja además Podemos de que esos contenidos «adolecen de un enfoque heterosexual, que limita la sexualidad a la etapa reproductiva».
El polémico ‘Skolae’
Este jueves, la ministra de Educación, Isabel Celaá, ya avanzó en el Congreso que la derogación de la Lomce y su reemplazo por la nueva ley educativa Lomloe será el primer proyecto de ley del Gobierno.
La novedad más importante será que los profesores deberán pasar un año de prácticas tuteladas antes de incorporarse de pleno a su labor docente. La futura norma abordará también, anunció Celaá, la educación afectivo-sexual adaptada a la edad de los alumnos.
Esta materia ha sido objeto de algunas polémicas, como ocurrió con ‘Skolae’ en Navarra. Aprobado por el anterior Ejecutivo de Uxue Barcos, ha sido asumido también por la socialista María Chivite que lo impondrá en todos los centros financiados con fondos públicos.
El programa ha resultado especialmente controvertido, ya que en uno de sus puntos, dirigido a niños de entre 0 y 6 años, se propone el «reconocimiento de la sexualidad infantil desde el nacimiento, despenalizando el reconocimiento y la vivencia de dicha sexualidad en el ámbito de la escuela y la familia» mediante, cita, la «curiosidad sexual» o los «juegos eróticos infantiles».
Este apartado generó una especial polémica, aunque desde el Gobierno navarro se aseguró que con «juegos eróticos» se refería a «algo tan sencillo como al conocimiento del propio cuerpo y el del resto, y a nombrar esas diferencias».
De hecho, el dossier del programa destaca también que «nunca se propondrán ni se animarán ni se promoverán en las aulas actividades de contenido sexual, ni se llevarán al aula juguetes eróticos». Una aclaración sin embargo, que no libró a esta propuesta de las críticas.