Francisco Vázquez: «El pacto Sánchez-Iglesias rompe el consenso constitucional y es hostil a la Monarquía»
Francisco Vázquez (La Coruña,1946) cuestiona en OKDIARIO las intenciones Pedro Sánchez en el acuerdo para formar un gobierno socialcomunista con Podemos, realizado a su juicio “por oportunismo para continuar en su puesto que es lo único que le preocupa”. El ex alcalde de La Coruña y ex embajador de España ante la Santa Sede, destaca que mientras Sánchez “ayer pactaba con Ciudadanos y hoy lo hace Podemos y mañana pactará sabe Dios con quién”.
PREGUNTA: ¿Qué le parece la rapidez del acuerdo?
RESPUESTA: Se tapan las espaldas para evitar cualquier contestación interna de sus dos partidos. Son dirigentes de dos partidos que han perdido votos y escaños. Habrá muchos militantes y dirigentes que se estarán preguntando ¿para qué se convocaron estas elecciones? Los afiliados no van a poder decir: «oiga, por qué ha convocado estas elecciones diciendo que no ha llegado a un acuerdo con Podemos y ahora llega».
Todo ello es consecuencia de ese cesarismo implantado a través del sistema de primarias que suprime la intervención, control y participación de órganos de dirección, como en el caso del PSOE es el Comité Federal. Es un sistema propio de los partidos de corte anarquista o comunista en los cuales todo se aprueba ‘a la búlgara’ apoyando al líder.
Paco Vázquez: «De las cuatro derrotas electorales, Sánchez las ha convertido en triunfos personales»
P.: Pedro Sánchez ha convocado una consulta a la militancia el día 23 de noviembre…
R.: No son consultas directas. De los cinco peores resultados que ha tenido el PSOE en estos cuarenta años de democracia, cuatro han sido de Pedro Sánchez. De las cuatro derrotas electorales, Sánchez las ha convertido en triunfos personales. El discurso de la última noche, aparte de pedir a la gente que se callara, que demuestra ya un poco esa prepotencia que últimamente tiene, fue de vergüenza ajena. Exigiendo que tiene que ser él quien gobierne cuando puede haber otra serie de alternativas.
P.: ¿Usted considera que existe alguna alternativa a este pacto entre Sánchez e Iglesias?
Desde la mayoría Constitucional, PP y Ciudadanos, y algún otro partido incluso, pueda surgir un planteamiento de llegar a un acuerdo con una persona que no sea el señor Sánchez. O incluso, desde el seno del PSOE.
Personas como Pepe Borrell, Javier Solana o cualquier presidente autonómico, podría ser el enganche para formar una mayoría Constitucionalista. Sin embargo, una vez más, este hombre en cada elección cambia de aliados, cambia de proyectos con tal de garantizarse lo único que le preocupa que es perpetuarse en el poder.
«El acuerdo rompe con el pasado del PSOE, con el proceso constitucional y es hostil a la institución monárquica»
P.: ¿Ha tenido la oportunidad de hablar con algún compañero del PSOE?¿Cuál es la sensación que tienen con este pacto?
R.: Hay un profundo disgusto en el PSOE. Yo me he dado de baja del PSOE con motivo de la aplicación de la Ley de memoria histórica. Ha sido un enfrentamiento con el pasado del propio PSOE. Y como yo, muchos compañeros se han alejado del PSOE. Otros siguen con una posición muy crítica internamente, todos profundamente disgustados.
Hay una tercera lectura de este pacto. El señor Sánchez establece una alianza con un partido antisistema, un ‘Gobierno progresista’ dicen con la boca llena. Menudo progreso cuando estamos conmemorando la caída del muro de Berlín y en España empiece a gobernar algo tan caduco como es el comunismo. Pacta con un partido rupturista con la Transición, con el proceso constitucional, con el modelo de Estado y hostil claramente a la institución monárquica.
El PSOE de Felipe González y Alfonso Guerra es el del compromiso constitucional, de hacer frente a los partidos nacionalistas e independentistas y el de hacer frente a esos partidos rupturistas como es el caso de Podemos.
P.: Además de Podemos, Sánchez va a necesitar a más socios…
El PSOE actual va a pactar con los partidos que no votaron a favor de la Constitución. Va a pactar con el PNV, ERC, Bildu y toda la amalgama de Podemos que son los herederos directos de la sopa de siglas de extrema izquierda que fueron hostiles a la Constitución y propugnaban la sustitución de la dictadura de Franco por la implantación de dictaduras como podía ser la castrista, hoy de Maduro, o la defensa que hacen a Evo morales.
P.: Se avecina una nueva crisis económica, muchas voces temen que esta alianza dispare el gasto público. ¿Está de acuerdo con este análisis?
La gran equivocación es hacer un análisis puramente económico. Las consecuencias son las políticas. No es un problema económico. El PSOE puede hacer el gobierno con el partido de izquierdas, incluso si me apura con un partido comunista como era en su época el de Santiago Carrillo, comprometido con la Constitución y hacer una gran política de izquierdas, desde el punto de vista económico. Yo no lo comparto, pero podría hacerse. El problema de hoy en día es la viabilidad del modelo de Estado en el que estamos. Al PSOE, Podemos y Errejón les faltan todavía 18 votos. ¿De dónde salen los 18 votos? De todos los partidos independentistas, golpistas, que están llevando a cabo en estos momentos una insurrección generalizada.
Los políticos tenemos que plantear nuestros razonamientos en el conocimiento de la historia. Eso nos permite intentar repetir los aciertos del pasado, sobre todo nos obliga a no repetir los errores del pasado. La situación que tenemos hoy en el Parlamento es propia de la Primera República. Lo que ha hecho Sánchez no tiene perdón de Dios.
P.: El PSOE es un partido de Estado y con experiencia liderando un país. Ahora se abraza a Podemos, una formación que jamás ha gobernado. ¿Usted le augura un buen futuro a esta alianza?
R.: El problema son las consecuencias de estas alianza. Es una alianza a tres: PSOE, Podemos más los grupos nacionalistas que le darán la mayoría. Las consecuencias de ellas van a ser tremendas. Fíjese a qué grado de cinismo pueden llegar que firman un documento que dice que “hay que dialogar en Cataluña” y lo dicen en el mismo momento en el que se han ocupado las fronteras por parte de los mismos grupos independentistas que ocuparon aeropuertos y cortaron carreteras y bloqueado ciudades. Y ¿con eso hay que dialogar?
El sentido común indica que hay que aplicar la Ley con todas sus consecuencias. Fíjese en el grado de cinismo al que se llega en este documento, que por cierto, es un documento lleno de tópicos, se dice que en Cataluña hay que garantizar, la convivencia a través del diálogo. No. En Cataluña hay que garantizar la convivencia a través de la Ley y defender a aquellos que están en estos momentos constreñidos en sus libertades y amenazados.