Aguado: «A lo que Arrimadas se refiere es que si reformamos la Constitución lo hacemos todos»

Ignacio Aguado es portavoz de Ciudadanos en la Asamblea de Madrid y miembro de la Ejecutiva Nacional del partido. Abogado de profesión, dejó el sector privado hace dos años para participar del cambio que ha dado el panoráma político. En sus primeras elecciones autonómicas como candidato, las del pasado 2015, obtuvo 17 diputados y gracias a su apoyo gobierna desde entonces Cristina Cifuentes.

Pregunta.- ¿Debería dimitir Josefa Aguado tras la llamada del juez a declarar?

Respuesta.- Ella es la que tiene que decidir si acude voluntariamente o no a comparecer, es una posibilidad que le ofrece el juez porque de lo contrario, al estar aforada, tendría que ir al Tribunal Superior de Justicia. Lo que demuestra que si no hubiera aforamientos, como propone Ciudadanos, esta diputada ya estaría compareciendo.

Nuestro objetivo en temas de corrupción es acabar con la corrupción en Madrid y acabar con las dudas. Igual que hemos hecho con otros casos como el del señor Ortiz que ha tenido que abandonar su escaño, en el caso de que se le impute pediríamos que Cifuentes tomara medidas.

P.- ¿También piden la dimisión del alcalde de Alcorcón a nivel regional?

R.- Nosotros hemos pedido formalmente su dimisión a nivel municipal y autonómico. Una persona que ha hecho esas declaraciones no está en condiciones de llevar una alcaldía como la de Alcorcón, con una población muy joven, muy moderna, muy plural, muy tolerante y que tiene un alcalde que no ha estado a la altura con esas declaraciones.

Hemos pedido su dimisión y le corresponde a la señora Cifuentes decidir si le mantiene al cargo de Alcorcón y en la Asamblea de Madrid. No queremos cambiar al PP, no queremos que deje de ser un partido conservador, pero sí le he pedido a Cifuentes que se plantee qué personas tiene al frente de sus ayuntamientos. Personas que tienen esos discursos no son del siglo XXI, ojalá que reflexionen y tomen una medida y digan qué posicionamiento toman en temas como la mujer, LGBT, o aborto, donde personas como Pérez no opinan como el resto de los ciudadanos.

P.- ¿Cree que puede afectar a la aprobación de Presupuesto la baja por enfermedad de la diputada del PP, Elena González-Moñuz?

R.- Yo espero que las combinaciones y la aritmética parlamentaria siga funcionando porque eso nos permite llegar a acuerdos con el PP y con el PSOE y Podemos. Esto nos convierte en un partido de centralidad en materia parlamentaria y nos da una fuerza enorme en la Comunidad de Madrid.

Espero que ese equilibrio se siga produciendo para sacar medidas adelante. Si dejáramos de sacar medidas porque el PP tiene problemas internos pues habría que ver qué hacer. Yo espero que la dimisión de personas imputadas no supongan la pérdida del equilibrio y que la diputada y ex portavoz del PP en la Asamblea no suponga un bloqueo institucional o político. Habrá que ver cómo resuelve este problema el PP y ojalá que lo resuelva y sigamos sacando pactos adelante.

P.- ¿Ve la posibilidad de unas nuevas elecciones si no se aprueban los Presupuestos autonómicos?

R.- Yo espero que no se produzcan elecciones, no por Ciudadanos, sino porque los madrileños y los españoles estamos hasta el gorro de elecciones. Llevamos demasiadas citas electorales y lo que les corresponde a los partidos que están en el gobierno es gobernar, y a los partidos de la oposición que trabajemos para que vean que trabajamos para los ciudadanos. No como se ha demostrado en legislaturas pasadas, porque estamos aquí para resolver problemas y sacar medidas adelante.

Que la gente vea que Ciudadanos hace política útil, y si hay que convocar elecciones es un tema que a día de hoy es ciencia ficción porque estamos a la espera de que el PP resuelva sus problemas, y seguramente la votación de presupuestos no se hará hasta enero o febrero. Tenemos tiempo para que puedan resolver sus problemas internos.

P.- ¿Cómo se ve desde Madrid el viraje de Inés Arrimadas hacia un posible referéndum de secesión?

R.- Yo no he visto ningún viraje, sé que hay partidos y medios de comunicación que intentan hacer creer que hay un viraje pero en Ciudadanos defendemos exactamente lo mismo que cuando surgió en Cataluña, como un movimiento civil que hace frente al nacionalismo.

Por eso estamos liderando la oposición el Cataluña, la suma de escaños de PP y PSOE hace el número de escaños total de Ciudadanos prácticamente. Somos un partido que está liderando la batalla contra el nacionalismo y ojalá podamos seguir contando con PP y PSOE para luchar contra el nacionalismo. Habrá que preguntarles a ellos los intereses de situar a Ciudadanos en esa postura.

Desde luego el discurso de Inés Arrimadas es absolutamente contundente contra el nacionalismo y nunca hemos defendido ningún tipo de referéndum de este estilo, somos contrarios a cualquier tipo de consulta soberanista. Queremos reformar España, acabar con los privilegios y esos proyectos que buscan romper España. No sé de dónde habrá salido esa interpretación, desde luego malintencionada.

P.- ¿Entonces a qué se refería Arrimadas al afirmar que participaría en un referéndum?

R.- A lo que ella se refiere, y siempre hemos dicho todos los miembros de Ciudadanos, es que si queremos reformar la Constitución hay que hacerlo entre todos. No vale que parte del país decida convocar un referéndum separatista o sentirse con la soberanía de su comunidad, porque lo que ocurre en Cataluña me afecta a mí como madrileño y a los andaluces.

Cuando haya que hacer alguna reforma seremos todos los españoles los que decidamos qué queremos que sea España. No solo una parte de Cataluña. Y si hubiera una reforma nunca permitiríamos que se produjera un referéndum de secesión, porque va en contra del ADN de Ciudadanos, que nació con un proyecto común, que sea atractivo para todos los españoles y que de una vez creamos que nos va mejor juntos que separados.

P.- ¿Cree que su formación autonómica sirve de ejemplo para Ciudadanos a nivel nacional por su pacto de gobierno con el PP?

R.- Las situaciones son distintas a nivel nacional y a nivel autonómico, pero sí es verdad que en la Comunidad de Madrid Ciudadanos estamos siendo la punta de lanza de una forma de hacer política distinta. Somos el partido que tiene la llave para sacar adelante presupuestos y reformas, y tenemos la gran suerte de que los madrileños nos han dado 17 escaños y no 16 que es exactamente la cantidad perfecta y exacta para poder pactar con el PP y tener mayoría absoluta en la cámara para pactar con PSOE y Podemos.

Sumar esa mayoría absolutas es muy importante y exige un plus de responsabilidad porque ya no vale hacer oposición clásica, destructiva de: todo lo que dice el gobierno está mal y todo lo nuestro está bien.

Hay que ser responsable, estamos marcando el camino y ojalá a nivel nacional seamos capaces de llegar a acuerdos con unos y con otros y nos empecemos a fijar qué se propone y no quién lo propone. Ese es uno de los grande aspectos a corregir en la política nacional. Hay que ver qué se propone, y si es bueno me es indiferente que lo proponga el PP o el PSOE; si lo que se propone va a beneficiar a los madrileños adelante. Esto lo estamos demostrando en la comunidad y espero que a nivel nacional lleguemos a esa altura política que a día de hoy estamos defendiendo los 4 grupos.

P.- ¿Consideraría su salto a la política nacional en un futuro?

R.- Me preocupa bastante poco mi carrera. Yo llevo toda la vida en la empresa trabajando fuera de la política y ahora hace un año y medio entré en esta vorágine que es la política en una etapa preciosa donde ya no hay mayoría absoluta. Ahora hay que poner en valor la capacidad de moderación y ser capaz de proponer y ser constructivo, yo voy a estar el tiempo que el partido considere. También estaré el tiempo que yo considere personalmente.

En cualquier caso no tengo ningún tipo de aspiración política, quiero ayudar, intentar cambiar las cosas, que por eso entré en política. Estaba cansado de lo de siempre: que el PP y el PSOE nos tomaran como menores de edad, no resolvieran los problemas reales y por eso entré. Estaré un tiempo de mi vida, una etapa y volveré a mi empresa y a otros proyectos personales o profesionales. 

P.- ¿Qué es lo más bonito y lo peor de la política?

R.- Lo más bonito es ver cómo los cambios que propones y que impulsas luego se ven en la calle. Por ejemplo el haber conseguido bajar un 15% las tasas universitarias es una cosas que se ve, que los jóvenes pagan un 15% menos que hace un año y medio. Que las cuotas infantiles de escuelas de 0 a 3 años han bajado un 20% en un año, eso se ve y eso es política útil. Que el Canal de Isabel II siga siendo de todos y no se haya privatizado, que no se suban impuestos en la comunidad, me parece que estamos haciendo cosas que tienen mucha visibilidad y me hace sentir orgulloso de lo que estamos consiguiendo.

Lo peor es ver cómo a los mecanismos y al sistema les cuesta mucho cambiar. Tienen muchas dinámicas y rutinas adquiridas. El propio PP y el funcionamiento de la Asamblea, los reglamentos son muy rígidos, los cambios llegan poco a poco y eso lo comparo con los cambios en la empresa privada que son mucho más rápidos y se nota.

Cuesta mucho cambiar rutinas con gobiernos como el del PP que lleva 20 años gobernando en la Comunidad de Madrid. Diputados que llevan muchos años pisando moqueta y pisando poca calle, que todavía tienen dejes de arrogancia y mayorías absolutas y poco a poco van cambiando pero cuesta.

P.- ¿Qué ha aportado Podemos a la vida política?

R.- Ciudadanos nació en 2006 y podemos en 2014. Podemos lleva dos años en el panorama político nacional, su irrupción ha sido muy fuerte, Ciudadanos lleva 10 años en Cataluña trabajando también muy fuerte contra el nacionalismo, y apenas un año y medio a nivel nacional con su proyecto en otras comunidades.

Podemos ha capitalizado muy bien un sentimiento de indignación compartido por muchos millones de españoles que estábamos cansados de lo que pasaba, pero hay una parte muy importante de esos españoles que en un principio estábamos cansados e indignados que cuando te serenas lo que quieres son soluciones.

No quiero más indignación, ni más pancartas, no quiero más gritos, destrucción, quiero construir, quiero ver dónde están los problemas para corregirlos. Y Podemos se ha quedado estancado en la indignación, la camiseta y la pataleta y eso cansa.

En la etapa de las soluciones Podemos desaparece, se diluye porque no tiene soluciones, tiene populismo, soluciones fáciles a problemas que son muy complicados. Que necesitan estudiarse en muchos puntos de vista, desde muchas aristas, y ahí podemos es cuando se pierde, cuando sale de la calle, cuando el panorama se calma, cuando las cosas vuelven a su cauce y hay que negociar.

Podemos desaparece cuando no tiene la televisión, la camiseta y el puño en alto, Podemos deja de tener sentido. Josep Borrell decía que Podemos es un estado de ánimo y es verdad. Es un estado de ánimo, de indignación.

Pero es que indignándote no construyes, está muy bien pero hay que pasar a un segundo nivel y es en el segundo nivel donde Ciudadanos se está capitalizando con soluciones realistas, con políticas sociales de las que se pueden cumplir.