Absueltos los abogados acusados de grabar la declaración de la Infanta Cristina ante el juez Castro
El Juzgado de lo Penal número 6 de Palma ha dictado una sentencia en la que absuelve a los abogados María del Carmen Jiménez y Francisco José Carvajal, que fueron juzgados en junio acusados de grabar a la Infanta Cristina, hija del rey emérito, durante su declaración ante el juez José Castro en la fase de instrucción del caso Urdangarin.
En la sentencia, a la luz de las pruebas periciales practicadas, la juez considera que no ha quedado acreditado que los dos letrados grabaran imágenes y parte de la declaración de la Infanta Cristina utilizando un dispositivo oculto.
Los abogados estaban acusados de un delito de desobediencia grave y fueron defendidos en el juicio por los letrados Alberto Domínguez Vázquez y Pedro Ángel Villalba. Durante la vista, recordaron que habían pasado por un exhaustivo control de seguridad a las puertas del Juzgado en el que se les requisaron todos sus aparatos electrónicos.
En febrero de 2014, Carvajal y Jiménez acudieron a la declaración de la Infanta en sustitución de Javier Saavedra, que defendía a Robert Cockx, entonces imputado como presunto testaferro de Iñaki Urdangarin.
Estaba ordenado a que la declaración de la Infanta «sólo se grabara en soporte oficial y de audio» y que de este material «no se entregaría copia a ninguna de las partes ni al Ministerio Fiscal».
Además, se había prohibido «expresa y terminantemente» acceder al interior de la sala con ningún tipo de dispositivo «apto para la captación de imagen y sonido» para asegurar que «ninguna grabación de la imagen o del sonido se obtuviera fuera de los cauces habilitados para ello».
Sin embargo, pese a estas instrucciones parte de la declaración fue grabada y filtrada en Internet en la plataforma Wouzee.
El abogado de Carmen Jiménez, Alberto Domínguez, ha expresado su «satisfacción» porque «tres años y medio después se ha hecho justicia». El letrado ha explicado que su defendida desea que la sentencia absolutoria tenga «la misma repercusión» que tuvo la acusación.
La sentencia no es firme y contra ella cabe recurso de apelación ante la Audiencia Provincial de Baleares.