El 1-0 tensiona la franja aragonesa: «Quieren comprar a nuestros políticos y la sociedad está partida»
Para la CUP «los países catalanes confederales» incluyen Cataluña, la Comunidad Valenciana, Baleares y la Franja de Poniente, o lo que es lo mismo, la frontera que conforman cuatro comarcas orientales de Aragón: Ribagorza, La Litera y Bajo Cinca de la provincia de Huesca; y la comarca del Matarraña de la provincia de Teruel.
Su pretensión es anexionar este 10% del territorio aragonés a Cataluña y para ello, según los vecinos de estas tierras, «llevan 25 años de pedagogía» consentida por muchas fuerzas políticas que consideran “tabú» la defensa del castellano. Falta menos de una semana para el 1 de octubre y la tensión en estos territorios se palpa en el ambiente. «Que se independicen o que hagan lo que quieran, pero que no nos afecte», se escucha en las calles de las localidades fronterizas con Cataluña.
Ángel Hernández y Jesús Vázquez, son portavoces de la plataforma ‘No hablamos catalán’ que agrupa a distintas asociaciones y agrupaciones políticas con el objetivo de desmontar los mitos catalanes que tratan de reescribir la historia de la Corona de Aragón.
OKDIARIO ha venido dando cuenta de algunos de estos episodios, figurando incluso en la propia página web de la Generalitat, como la existencia de los «reyes catalanes» a los que atribuyen una etapa de gran prosperidad. Evidentemente, ni Cataluña fue un reino, ni, en consecuencia, tuvo reyes sino que el territorio se unió al Reino de Aragón en la condición de Condado de Barcelona.
«El adoctrinamiento comienza en 5º de Primaria»
También y entre las ‘últimas’ se encuentra el premio que la Diputación General de Aragón (DGA) otorga a un seminario educativo por «normalizar» el catalán en la comunidad. La cuestión educativa sigue preocupando «y mucho» a la plataforma ‘No hablamos catalán’ que denuncia que los políticos aragoneses, «en general», hacen oídos sordos a la cuestión de la lengua.
«El adoctrinamiento catalanista comienza en los libros de texto de 5º y 6º de Primaria y también en 1º y en 2º de la ESO», explica Vázquez. «A los niños les enseñan que Tamarite, Fraga y Valderrobres son poblaciones catalanas y se inventan la Corona de Cataluña». Esta plataforma se plantó en la Consejería de Educación del Gobierno de Aragón para dar cuenta a los políticos del adoctrinamiento por parte de las editoriales catalanas.
«Estamos volviendo a la preguerra»
«Nos dijeron que no era para tanto. Hemos escrito a más partidos y no nos han hecho ni caso, salvo el PP y el Partido Aragonés (PAR)», comenta Hernández. «Antes las conquistas eran con espadas y ahora son con marketing y dinero. Quieren comprar a nuestros políticos y lo peor es que lo están consiguiendo», añade. Ambos portavoces observan con «preocupación la radicalización» hasta de sus propios vecinos: «En mi bloque viven familias catalanas y ahora de repente odian a todo y a todos».
Además del proyecto educativo, estas localidades temen que el sector agropecuario se vaya al traste si de verdad Cataluña se independiza. «Exportamos electricidad tanto a Francia como a Cataluña y tenemos excedente en energía eólica.
Aragón también es un gran exportador en el sector agropecuario y, no sé cómo han hecho las cuentas pero si se independizan habrá aranceles. ¿Y qué pasará con las empresas catalanas que han apostado por su expansión en Aragón? Son muchos puestos de trabajo en juego y la gente está muy nerviosa y con razón», explican.
Hernández considera que hay mucho malestar en estas localidades e incluso opina que «estamos volviendo a la preguerra». Temen que el separatismo afecte a sus trabajos, familia y vecinos. «Confiamos que el 1 de octubre no pase nada y que el Gobierno se ocupe, pero observamos con preocupación que la sociedad ya está rota», lamentan.