Zamora Company deja de vender Mar de Frades en México y se sostiene en una Rusia en guerra
Mar de Frades está vendiendo mucho la variedad godello en la zona alicantina porque no gusta el albariño


Zamora Company, empresa propietaria de Mar de Frades, deja de vender los productos de esta marca a México, aunque consolida Rusia como principal comprador de toda Europa pese a la invasión a Ucrania y a las sanciones de la Unión Europea (UE), según han explicado a OKDIARIO fuentes cercanas al grupo. Así, la compañía ha dejado de distribuir estos vinos en suelo mexicano, por lo que Colombia se ha quedado como su principal socio hispanoamericano.
Las mismas fuentes indican que Rusia es el país que sostiene a Mar de Frades en Europa, puesto que es el lugar en el que la distribución es más elevada. Tras ellos, se encuentra la costa mediterránea española, especialmente en Alicante.
Así, en el levante español, la bodega gallega de Zamora Company encuentra su clientela, dado que sus vinos no son excesivamente populares en Galicia y alrededores, pese a ser productos típicos de la tierra como el albariño o el godello.
En ese sentido, las mismas fuentes indican que Mar de Frades está vendiendo mucho la variedad godello en la zona alicantina: «se está poniendo de moda porque a la gente no le gusta la acidez del albariño».
La innovación de Zamora Company
Tal y como ha adelantado este periódico, Zamora Company ha estado experimentando un depósito de granito en el proceso de formación y fermentación del vino de Mar de Frades. Sin embargo, los resultados no están siendo los esperados.
En concreto, los viticultores «aún no han sacado al mercado» los productos que pasan por estos barriles porque prevén que sería un «fracaso en ventas», dado que «la botella valdría alrededor de 60 euros».
La bodega de Mar de Frades, situada en Meis (Pontevedra), incorporó hace unos años un depósito de granito para experimentar con su vino. La idea surgió en 2015 de la mano de la enóloga Paula Fandiño, directora técnica de la empresa. Los viticultores consideraron que las propiedades de este material podrían aportar un toque especial a sus productos.
Sin embargo, el vino debe ajustarse a la demanda. Por el momento, explican las fuentes, el resultado de dicho experimento no se ha sacado al mercado porque consideran que los clientes «no estarían dispuestos» a pagar tanto. La empresa prevé que cada botella se tendría que vender por 60 euros.
En el año 2018, Mar de Frades preveía poder lanzar un vino fermentado en el bloque de granito poco después de 2020. Siete años después, los consumidores siguen sin saber nada de este producto, que la empresa teme lanzar. En la actualidad, la bodega sigue experimentando con diferentes combinaciones.
«Están experimentando con vinos. Los van metiendo en madera unos meses, después en hormigón, después otra vez en madera… Hacen diferentes combinaciones y lo van probando», explican a este periódico fuentes cercanas a Mar de Frades.
Algunas de esas combinaciones implican al bloque de granito, algo que «solo tienen ellos» y que es «típico de Canadá». «Este es un vino que congelan a -4º de temperatura», explican las mismas fuentes. Pero, por el momento, «no resulta rentable» para la compañía. «Tienen miedo de que no haya demanda», sentencian.