El sistema de pensiones se hace insostenible: el gasto en subsidios sube 5 veces más que el PIB en 2023

El gasto en pensiones aumentó un 10,2% en el 2023 en comparación al año anterior y el Producto Interior Bruto (PIB) subió un 2,4% en el mismo periodo, cinco veces menos, según los datos y previsiones de Funcas.  En concreto, el Gobierno gastó en el subsidio 15.800 millones de euros más en un año, hasta los 170.800 millones de euros.

La suma anterior contiene el gasto en pensiones contributivas y no contributivas. Según Funcas, «se trata del mayor incremento anual de la historia, que triplica el ritmo de crecimiento registrado a lo largo de los últimos 15 años».

El aumento del gasto en pensiones de una forma tan descoordinada con el crecimiento de la economía española no se daba con otros ejecutivos. En 2017, el Gobierno de Rajoy subió el coste de las pensiones un 3%, exactamente el mismo incremento que sufrió el PIB en ese año.

Aumento récord del gasto en pensiones

Tan sólo en enero de este año, el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones destinó la cifra récord de 12.651,2 millones de euros al pago de la nómina ordinaria mensual de las pensiones contributivas, un 6,3% más que en el primer mes de 2023.

La cartera dirigida por la nueva ministra Elma Saiz estima que el gasto en pensiones se situó en los últimos 12 meses en el 11,5% del PIB. Este dato es inferior al de los años anteriores:

• 2022: 11,7% del PIB
• 2021: 12,1% del PIB
• 2020: 12,4% del PIB

Sin embargo, esos tres años han estado marcados por los efectos económicos de la pandemia, es decir, por un extraordinario retroceso de la economía española y su posterior y paulatina recuperación.

De hecho, Victor Muñoz, banquero privado independiente en Andbank, advierte que la estimación del PIB está infravalorada y que los ratios anteriores serían aún mayores: «Se está metiendo la economía sumergida. El dato presume que algo genera 40.000 millones sin conocerse en realidad. Al sobreestimar el denominador de la ecuación, sale un porcentaje más bajo».

Para Samanta Nebrija, economista y docente, «el notable aumento del gasto en pensiones durante 2023 pone de manifiesto la gestión poco sostenible del sistema de pensiones». «Es preocupante que, a pesar de este crecimiento sin precedentes, el gobierno no haya tomado medidas significativas para abordar la viabilidad financiera a largo plazo del sistema», defiende.

«Es evidente que la falta de reformas estructurales en el sistema de pensiones, como ajustes en la edad de jubilación y una revisión integral de la fórmula de cálculo de las pensiones, ha contribuido a esta situación insostenible. La gestión actual parece carecer de una visión estratégica para abordar los desafíos demográficos y económicos», lamenta Nebrija.

Carlos Lariño, presidente de Aealce, afirma que la subida del gasto en el subsidio no se ha traducido en una mejora en la calidad de los pensionistas: «A pesar de los incrementos en las pensiones, la erosión del valor real de estas debido a la inflación persiste. Además, el gobierno no ha ajustado las tarifas de IRPF para los pensionistas, lo que significa que, en última instancia, reciben menos dinero efectivo».

«Esta situación afecta especialmente a los pensionistas con ingresos bajos, quienes dependen en gran medida de estas pensiones para cubrir sus necesidades básicas. Para ellos, la pérdida de poder adquisitivo representa un verdadero desafío para afrontar los gastos esenciales de la vida», advierte el presidente de la asociación.

Además, Lariño considera que el contexto futuro será desfavorable para el mantenimiento del sistema actual: «Nos enfrentamos a un desafío estructural relacionado con la baja tasa de natalidad y la pirámide poblacional invertida, una tendencia que se observa en toda Europa».

«El aumento de la población de edad avanzada en comparación con una disminución en la tasa de natalidad implica una reducción constante de la fuerza laboral encargada de respaldar a los pensionistas a través de los impuestos. Idealmente, se necesitarían dos trabajadores por cada pensionista para mantener este sistema, pero actualmente no alcanzamos esa proporción, lo que resulta en mayores impuestos para los trabajadores para sostener el sistema de pensiones».

El gasto actual de las pensiones obliga al país a endeudarse para poder sostener el sistema. De hecho, Pedro Sánchez ha convertido a España en una de las economías con más deuda pública de la eurozona, según los datos de Eurostat. El país debe ya una cifra récord de 1,57 billones de euros. Es más, el Ejecutivo no fue capaz de cubrir un 23,8% del gasto público de 2023 con los ingresos que recibió, según el Instituto Juan de Mariana. En concreto, las cuentas públicas de España se mantienen a base de deuda a partir del 30 de noviembre, día en el que agota todos sus ingresos.