El PIB de EEUU y la rebaja de previsiones de Alemania ponen a las Bolsas en ‘modo recesión’

«El mercado ya está descontando una alta probabilidad de recesión», comienzan a indicar algunos expertos. En un contexto de incertidumbre económica propiciada por la guerra en Ucrania, la inflación, los confinamientos en China o el endurecimiento de las políticas de los bancos centrales, la revisión a la baja del PIB de Alemania y la contracción de EEUU echan más leña al fuego de las Bolsas.

Mientras que al cierre de esta edición en España todavía esperamos las nuevas previsiones macroeconómicas con rebaja del PIB que acompañarán al Plan de Estabilidad, el miércoles el Gobierno alemán recortó sus previsiones de crecimiento para 2022. Lo hizo hasta el 2,2% desde el 3,6% anterior, aunque el Bundesbank estima que el país podría decrecer hasta un 2% si se produce una escalada de la guerra en Ucrania y se restringe el suministro de carbón, petróleo y gas desde Rusia.

Este viernes se conocerá el PIB germano del primer trimestre de 2022, un día después de que EEUU informase de que su economía se contrajo un 1,4% entre enero y marzo respecto al mismo periodo del año anterior y un 0,4% en comparación con los tres meses anteriores.

“Los retrasos en la cadena de suministro se están acelerando y afectan a las empresas de todo el mundo. Los titulares rusos en torno al suministro energético polaco y búlgaro indican una escalada del conflicto en Ucrania, lo que contribuye a una mayor volatilidad de los costes energéticos y a la preocupación por la energía en Europa”, destacan en la gestora Federated Hermes. Son sus analistas los que incluyen en un informe esa frase de “el mercado ya está descontando una alta probabilidad de recesión”.

El escenario de recesión es el que mantiene muy inquietos a los inversores en Wall Street, que temen que la agresividad con la que se espera que la Reserva Federal (Fed) retire sus estímulos monetarios pueda abocar al país a una contracción económica en 2023. Los analistas de Link Securities entienden que “todo va a depender del comportamiento de la inflación en los próximos meses, variable que va a ser determinante en muchos aspectos para el comportamiento de los mercados de bonos y de renta variable occidentales”.

A estas alturas del ejercicio, el interés del bono estadounidense ronda el 3%, mientras que el S&P 500 cae en torno a un 12% y el Nasdaq 100, con una caída del 20%, transita niveles no vistos desde 2020. En Europa, salvo el FTSE 100 británico el PSI portugués, los índices también sufren en el acumulado anual. Con ese runrún de recesión, «los mercados están volviendo a testear los mínimos del año hasta la fecha», advierte Ben Laidler, estratega de mercados globales de eToro.

La subida de los tipos de interés de la Fed ha impulsado las rentabilidades de los bonos, una fuerte reducción de las valoraciones, la rotación de las tecnológicas y ahora aviva los temores de recesión. La estrategia restrictiva de ‘cero-covid’ de China completa la triple vertiente de cautela en los mercados globales. «Nos encontramos en un mundo de inversión nuevo y más difícil, pero cabe ver el vaso como «medio lleno», navegando entre los riesgos de las valoraciones y el crecimiento con un enfoque hacia los cíclicos baratos y valores defensivos tradicionales», apunta el experto de la plataforma de inversión.