Otra luz roja para el turismo: es el sector donde más cayó la demanda eléctrica en junio

Las señales de alarma para el sector turístico se siguen acumulando pese a la euforia gubernamental y apuntan cada vez más claramente a un estancamiento de la economía española. Fue el sector en que más cayó la demanda eléctrica de grandes consumidores (empresas) en junio a pesar del comienzo de la temporada alta: un 10,8%.

El turismo es el principal sector que sostiene el crecimiento del PIB hasta ahora, y empieza a dar claros signos de debilidad. Este lunes se conoció que las cifras de turistas extranjeros siguen por debajo de las prepandemia de 2019, en especial por la caída de visitantes británicos.

De hecho, la propia Red Eléctrica -filial de Redeia, controlada por el Gobierno- reconoce que «las actividades de servicios mantienen un perfil de desaceleración progresiva y donde las actividades turísticas registran los mayores descensos relativos con respecto al mes anterior».

Como informó OKDIARIO, las grandes hoteleras españolas han subido los precios este año del orden del 20% para compensar que la ocupación sigue por debajo de los niveles anteriores al covid. La caída de la demanda de electricidad implica que, lejos de ir mejorando, la ocupación en junio (últimos datos disponibles) siguió sin recuperarse.

Según los datos de Red Eléctrica, la demanda total de electricidad de los grandes consumidores se desplomó el 10,4% en junio y acumula una caída del 10,1% en el conjunto de 2023, corregido por la estacionalidad. Un descenso que fue del 6,9% en la industria y del 16,5% en los servicios; esto es muy preocupante, puesto que el sector servicios supone el 70% del PIB y del empleo en nuestro país.

En el global de los seis primeros meses del año, el recorte fue algo más moderado: del 10,1%. Pero aquí la caída de la industria es mayor, del 11,4% frente al 9,4% de los servicios. Lo cual indica que en los primeros meses de 2023 fue la industria la que redujo más su producción y que ahora están sufriendo más los servicios.

Otras alarmas

Como también adelantó este periódico, el consumo de gas en España se redujo un 15,9% en julio, según datos de Enagás, el gestor las infraestructuras gasistas. Uno de los principales factores detrás de este descenso es la menor producción de electricidad consecuencia precisamente de esta caída del consumo.

El descenso de la demanda energética se suma a otros indicadores que apuntan claramente a un frenazo de la economía española, como la caída del 7% de las ventas de la industria en su tercer mes consecutivo de descensos, o el primer descenso de los ingresos del sector servicios en 27 meses. Asimismo, el estancamiento o contracción de los principales países europeos amenaza a nuestra economía por el lado de las exportaciones, que ya sufrieron un recorte en el primer semestre.

Precisamente, el turismo supone en torno al 50% del valor de las exportaciones españolas (se incluye dentro de esa rúbrica del PIB). Por tanto, si el turismo también se estanca, la aportación negativa de las exportaciones a la economía será más importante en los próximos meses.