Cotización del oro

Los inversores se preparan para una recesión e impulsan al oro a máximos de casi seis años

metal precioso
El oro no es el metal precioso más caro.
Natalia Mateos
  • Natalia Mateos
  • Periodista y redactora de economía en OKDIARIO. Tras tres años escribiendo sobre turismo y sus empresas, ahora estoy descubriendo el mundo de la distribución y el retail. Antes en el Palacio de la Bolsa y Cadena Cope. De Zamora y del Zamora.

El precio del oro se ha disparado y ya alcanza máximos de casi siete años, superando a los 1.400 dólares por onza. La rentabilidad del metal precioso lleva acumulado una revalorización superior al 7% en el último mes, tras cerciorarse de que la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) bajará los tipos de interés este verano.

La probabilidad, cada vez mayor, de una recesión económica a nivel global empuja a los inversores hacia valores refugio, como el oro, que se disparó más de un 2% durante la jornada de este jueves. Esto representa su mejor dato desde septiembre de 2o13 y demuestra la elevada exposición que presenta este metal a la evolución del dólar y las decisiones y declaraciones de la Fed.

Aitor Méndez, analista de IG Markets destaca que «el oro acumula ya una subida de más de 200 dólares desde el pasado mes de agosto, pero su cotización llegó a caer hasta los 1.160 dólares por onza y, solo en las últimas tres jornadas, su precio se ha encarecido en más de 50 dólares. Así las cosas, el metal de los dioses acumula ahora un avance semanal superior al 3%, algo que no sucedía desde el mes de abril de 2016 y, en lo que va de mes, el ascenso se sitúa próximo al 11%».

Por su parte, Nitesh Shah, director de análisis de Wisdom Tree, señala que «después de caer entre febrero y mayo, la cotización del oro ha visto una nueva oportunidad con el cambio de rumbo de la política de Jerome Powell, que indica que es muy probable que se reduzcan los tipos de interés. Además, el rendimiento del bono americano ha disminuido y la cotización del dólar estadounidense se ha debilitado, beneficiando enormemente a los activos refugio como el oro».

Nerviosismo en el mercado

Y es que a pesar de las tensiones geopolíticas y el temor a una desaceleración económica global, las bolsas acumulan importantes subidas que, sin embargo, podrían terminar muy pronto, de acuerdo con la tendencia que muestra el activo refugio por excelencia. El metal precioso, que está marcando su mejor registro desde 2012, sirve de alerta al mercado junto al otro activo refugio de referencia, la rentabilidad del bono alemán que actualmente presenta un tipo de interés negativo.

«Las bolsas están impulsadas por la promesa de nuevos estímulos monetarios, igual que la renta fija, pero queda por ver si todos los estímulos que esperan los inversores se materializan y si consiguen estabilizar las perspectivas cíclicas, que es lo que las bolsas necesitan para mantener las subidas. En caso contrario, veremos tomas de beneficios», ha destacado Natalia Aguirre, directora de análisis de Renta 4.

La subida en la cotización del oro se ha acelerado tras las declaraciones del BCE y la Fed donde se dejaban entrever una posible bajada de los tipos de interés en los próximos meses. En un informe llevado a cabo por el Citi, la entidad bancaria prevé que el valor de la onza alcance entre los 1.500 y 1.600 dólares.

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