El Banco de España constata una «intensificación» de la desaceleración económica en el cuarto trimestre

El Banco de España alerta en su último boletín sobre la situación económica en España, publicado este viernes, que ha constatado una «intensificación» de la desaceleración de la actividad en el país durante el cuarto trimestre por las nuevas medidas de restricción aprobadas por los diferentes gobiernos. El supervisor calcula que el Producto Interior Bruto (PIB) de los últimos tres meses del año caerá un 0,8% en su escenario central, frente a una subida del 0,6% en un escenario de impacto suave de la pandemia y un -3% en caso de un impacto severo. En tasa interanual, estas dinámicas se corresponderían con una pérdida de actividad del 8,6% en el escenario suave, del 9,8% en el escenario central y del 11,8% en el escenario severo.

«El endurecimiento de las medidas de contención de la pandemia durante el cuarto trimestre ha provocado una intensificación en la senda de desaceleración de la actividad que comenzó a observarse en el tercer trimestre», señala el supervisor en el informe. La entidad recuerda que aunque las medidas de restricción han sido más focalizadas que en marzo pasado, su impacto está siendo importante principalmente además en los mismos sectores económicos ya castigados por la primera ola.

En tasa interanual, estas dinámicas se corresponderían con una pérdida de actividad del 8,6% en el escenario suave, del 9,8% en el escenario central y del 11,8% en el escenario severo

«Esta ralentización de la actividad se ha visto reflejada en los indicadores de periodicidad mensual que habitualmente se emplean en el seguimiento de la coyuntura, en los de frecuencia más elevada, cuyo seguimiento ha cobrado relevancia con la crisis sanitaria, y también en la encuesta a empresas españolas elaborada por el Banco de España», explica el Banco de España. El supervisor recuerda que en esa encuesta, más de la mitad de las empresas reconocieron que habían sufrido una reducción de sus ingresos en este cuarto trimestre.

El paro cerrará el año en el 17%

Estos datos tiene su correspondiente reflejo en el empleo. El Banco de España señala que la intensificación de la desaceleración provocará un «leve descenso del empleo», medido en términos de horas trabajadas, durante el cuarto trimestre del año. La evolución normal es que las horas trabajadas desciendan en este último trimestre del año después de la fuerte recuperación registrada en el periodo junio-septiembre, aunque no de forma tan acusada como en el segundo trimestre, cuando el país estaba en pleno estado de alarma por la pandemia.

Esta «debilidad» en la evolución del empleo, junto con un ligero incremento de la tasa de participación, elevará la tasa de paro desde el 16,3% registrado en el tercer trimestre hasta el entorno del 17% en el cuarto trimestre.

Menos consumo

El Banco de España constata que la desaceleración económica se ha debido en parte por la caída del consumo interno. Los ciudadanos han reducido sus compras y han aumentado su tasa de ahorro en previsión de lo que pueda suceder con la pandemia.

«Tras repuntar con fuerza en el tercer trimestre, el consumo de las familias habría caído en el tramo final del año, lastrado por la intensificación de la pandemia y el endurecimiento de las medidas aplicadas para su contención. En esta dirección apuntan un amplio abanico de indicadores como, por ejemplo, las matriculaciones de vehículos particulares, cuyo ritmo de caída interanual se aceleró entre septiembre y noviembre», señala el supervisor.

El Banco de España constata que la desaceleración económica se ha debido en parte por la caída del consumo interno: los ciudadanos han reducido sus compras y han aumentado su tasa de ahorro en previsión de lo que pueda suceder con la pandemia

De hecho, el organismo presidido por Pablo Hernández de Cos alerta de que retirar las medidas de ayudas aprobadas por los gobiernos podría provocar un incremento de los impagos. «La situación patrimonial de los hogares se ha deteriorado como consecuencia de la pandemia, y una eventual eliminación de las medidas de protección de rentas y de las moratorias de deudas a medio plazo podría comprometer la capacidad de repago de las deudas de algunos hogares en una situación más vulnerable», señala.

Menos inversión en vivienda

Además, el supervisor adelanta que la inversión en vivienda se va a reducir en los próximos meses, frente al repunte de algo más del 15% en el tercer trimestre del año. En todo caso, señala el Banco de España, «la evolución reciente de los escasos indicadores disponibles referidos a la inversión en vivienda en el cuarto trimestre, como la confianza del sector de la construcción residencial (hasta noviembre) o el consumo aparente de cemento (hasta octubre), apunta a que esta sufriría una nueva recaída en el tramo final del año».