ATA alerta de que hay 550.000 autónomos que todavía no han podido volver a la actividad
Más de medio millón de autónomos no han podido volver a la actividad tras el parón provocado por el estado de alarma y el cierre obligado de negocios por el coronavirus. Así lo denuncia este lunes en un comunicado la asociación de autónomos ATA, que preside Lorenzo Amor.
Según ATA, ocho de cada diez autónomos sí que han vuelto a la actividad (82%). De estos, casi el 22% no han parado durante estos casi tres meses. Sin embargo, quedan todavía sin poder abrir sus negocios o reiniciar su actividad un total de 550.000.
En un análisis del funcionamiento de las actividades de los autónomos realizado por ATA, atendiendo a la rama de actividad, se muestra que en el comercio ya ha abierto el 85% del sector y que, sin embargo, la hostelería aún sigue en un 30% de aperturas. ATA ha puesto de relieve que sigue habiendo actividades que se encuentran «completamente paralizadas».
De hecho, ha resaltado que, además de la hostelería, se encuentran detenidas las actividades artísticas o todos los autónomos que dependen directamente de las actividades más propias de verano, junto con los autónomos del mundo de la cultura y del ocio o de la educación.
El presidente de ATA, Lorenzo Amor, ha asegurado que los autónomos van abriendo «poco a poco» sus negocios adaptándose cada semana a la nueva normativa y a las medidas de seguridad que exigen las autoridades sanitarias. No obstante, cree que es complicado volver a la normalidad «con tantas restricciones».
Dos años recuperación
«Vienen meses muy complicados y dos años de lenta recuperación de una economía a la que le han bastado tres meses para caer en picado», ha incidido, tras apuntar, que «mucho más difícil va a ser esta recuperación para aquellos autónomos que aun no saben cómo van a poder volver a su actividad, ni casi cuándo».
Por ello, Amor cree que es necesario tener certidumbre y seguridad y que esto «solo se consigue negociando y aprobando medidas de apoyo a los autónomos como la ampliación más allá del estado de alarma la duración del cese extraordinario de actividad, de los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTEs) y de las reducciones de impuestos para los sectores más castigados».