Ajuste inesperado del INSS en las pensiones: confirmado lo que van a cobrar los jubilados

El sistema de pensiones en España ha sido objeto de constantes actualizaciones, y este 2024 no ha sido la excepción. Los ajustes aprobados por el Consejo de Ministros a finales de 2023 han tenido un impacto significativo en millones de pensionistas. Con un incremento del 3,8% en las pensiones contributivas y del 6,9% en las no contributivas, se busca garantizar el poder adquisitivo de los beneficiarios y avanzar en la reducción de la brecha de género. ¿Pero de qué cantidades estamos hablando y sobre todo, cuánto más van a subir las pensiones para 2025?.

El ajuste en el importe de las pensiones afecta a más de 11,8 millones de pensiones y prestaciones, confirmando un esfuerzo por proteger a los colectivos más vulnerables. De este modo, la pensión media del sistema ha alcanzado los 1.258 euros mensuales, destacando los 1.445,75 euros de la media de jubilación. En paralelo, las pensiones mínimas y no contributivas también han experimentado incrementos, posicionándose en 517,90 euros al mes. Pero ¿qué implica esto para los pensionistas y cuáles son las expectativas para 2025? Con la inflación como telón de fondo, el próximo año trae nuevas subidas previstas en función del IPC. La revalorización del 2,8% garantizará que las pensiones mantengan su capacidad adquisitiva, aunque los ajustes no serán iguales para todos. A continuación, analizamos las cifras clave y lo que estos cambios significan para los jubilados.

Lo que van a cobrar los jubilados con las pensiones

En 2024, los pensionistas han visto cómo las pensiones contributivas experimentaron una subida media del 3,8%. Esto supuso un aumento anual de 600 euros para la pensión media del sistema, beneficiando a aquellos con ingresos más bajos, lo que refuerza la equidad del sistema. Por su parte, las pensiones no contributivas, esenciales para quienes no han cotizado lo suficiente, alcanzaron los 7.250,60 euros anuales.

Pero este año también contó con las llamadas «pagas extra» y en cuanto a la » Navidad», este segundo pago extraordinario se produjo a finales de noviembre, lo que ha permitido a los pensionistas recibir un ingreso adicional equivalente a dos mensualidades, una medida destinada a aliviar la presión económica en hogares con ingresos limitados.

El objetivo principal del ajuste es reducir las desigualdades, en especial la brecha de género. Las pensiones de viudedad, con una media de 897,9 euros mensuales, son las más representativas de esta desigualdad, siendo mayoritariamente percibidas por mujeres. Sin embargo, las subidas buscan equilibrar esta disparidad a largo plazo.

Lo que subirán las pensiones en 2025

La revalorización prevista para 2025, basada en el IPC, asegura un aumento del 2,8% en las pensiones contributivas. Esto va a servir para que la pensión media del sistema pase de 1.448 a 1.488,5 euros al mes, lo que supone un aumento de 40,5 euros mensuales. Para las pensiones máximas, el ascenso será aún más notable, llegando a los 3.267,55 euros mensuales.

En el caso de las pensiones mínimas y no contributivas, aún no se han detallado las cifras exactas, pero se anticipa que subirán por encima del IPC, siguiendo la línea de los ajustes recientes.

Los datos clave para 2025 son los siguientes:

• Pensión máxima: de 3.175 a 3.267,55 euros al mes.
• Pensión media de jubilación del sistema: de 1.448 a 1.488,5 euros al mes.
• Pensión media de jubilación del régimen general: de 1.606 a 1.651 euros al mes.

Estos incrementos reflejan un compromiso por adaptar las pensiones a las necesidades de los ciudadanos, manteniendo su capacidad adquisitiva en un contexto inflacionario.

Cómo afecta este ajuste a las diferentes pensiones

El impacto del ajuste se siente de manera diferente según el tipo de pensión. Las pensiones de jubilación, que representan la mayor parte del gasto, tienen un papel central. Sin embargo, otros colectivos también se benefician:

• Incapacidad permanente: incluye grados como total, absoluta y gran invalidez, con ajustes que garantizan una mayor protección.
• Viudedad y orfandad: su revalorización busca atender a las familias más vulnerables.
• No contributivas: diseñadas para quienes no cotizaron lo suficiente, garantizan un ingreso básico.

Además, el segundo pago extraordinario de noviembre es una novedad destacada, especialmente para las pensiones contributivas.

Expectativas para 2025: un sistema en constante evolución

A medida que llega 2025, se espera que la fórmula de revalorización basada en el IPC siga siendo la que se aplique. Aunque los incrementos del 2,8% parecen moderados en comparación con los de 2024, representan un paso necesario para mantener la sostenibilidad del sistema.

El reto principal será atender a las pensiones mínimas y no contributivas, ya que su incremento por encima del IPC es crucial para reducir las desigualdades. Además, la mejora en la brecha de género seguirá siendo una prioridad, con el objetivo de equilibrar las prestaciones entre hombres y mujeres.

El ajuste de las pensiones en 2024 y la revalorización prevista para 2025 reflejan el trabajo del INSS para garantizar el bienestar de los jubilados en un contexto económico desafiante a pesar que el incremento que van a tener los pensionistas el año que viene va a ser bastante menos que lo que les subió durante este año que en breve despedimos.