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Zidane picó a Varane y Nacho en la charla antes del derbi

Zidane picó a Varane y Nacho en la charla antes del derbi
Miguel Serrano
  • Miguel Serrano
  • Me confundieron con un joven prodigio pero acabé de periodista. Escribo cosas de deportes y del Real Madrid en OKDIARIO, igual que antes las escribía en Marca. También a veces hablo por la radio y casi siempre sin decir palabrotas. Soy bastante tocapelotas. Perdonen las molestias.

La extraordinaria actuación de Varane y Nacho en el Calderón acalló cualquier duda sobre el rendimiento de una pareja de centrales que, por las ausencias de los habituales Pepe y Ramos, suscitaba ciertas sospechas entre los críticos e incluso entre algunos madridistas. Sin embargo, a Zinedine Zidane no le tembló el pulso para ponerlos de titulares ambos completaron un partidazo y su labor fue sencillamente capital para que el Real Madrid dejara su puerta a cero por segundo partido consecutivo.

Zidane no quiso correr ningún riesgo con Sergio Ramos, que venía de una lesión complicada en la rodilla, y apostó por Varane y Nacho. Eso sí, el técnico francés quiso picar a ambos centrales en la charla previa al derbi del pasado sábado y les recordó que los dos formaron el eje de la zaga del Real Madrid en el 4-0 de infausto recuerdo en el derbi de 2014.

En aquel encuentro, que supuso el principio del fin de la era Ancelotti, la defensa del Real Madrid estuvo formada por Carvajal, Nacho, Varane y Coentrao. Es decir, tres de los cuatro futbolistas que fueron titulares el pasado sábado. Sin embargo, el rendimiento fue diametralmente opuesto. Tanto el francés, que está teniendo esta campaña galones de titular por las ausencias de Pepe y Ramos, como el canterano firmaron un partido perfecto ante el Atlético.

Ni Fernando Torres primero, ni Gameiro después, ni Griezmann o Carrasco en todo el partido fueron capaces de superar el muro formado por Varane y Nacho en el centro de la defensa del Real Madrid, siempre bien ayudados por el trabajo de los laterales y de los dos mediocentros, especialmente Kovacic, que se afanó en achicar agua en los momentos de dificultad de la segunda parte.

El plan de Zidane funcionó a la perfección y la extraña pareja de centrales, Varane y Nacho, se salió en el Calderón. Sin Pepe ni Sergio Ramos, el Real Madrid fue un equipo tremendamente sólido que no sólo no encajó ningún gol ante el Atlético, sino que tampoco concedió ocasiones al equipo de Simeone. Y esa, sin duda, fue una de las claves de la victoria del Real Madrid en el derbi.

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