Toda la verdad sobre la lesión de Toni Kroos


Estadio Santiago Bernabéu, Madrid. Domingo, 6 de noviembre de 2016. Durante el partido matinal entre el Real Madrid y el Leganés Toni Kroos recibe un fuerte golpe en su pie derecho. Siente el impacto, pero cuando se levanta pisa un par de veces el césped y no le da ninguna importancia. Con ese mismo golpe, otros jugadores saldrían en camilla, pero él, como buen alemán, casi ni lo nota. Cree que es sólo un golpe de los muchos que se lleva en un partido.
A las 16.00 horas de ese mismo domingo Kroos coge un avión rumbo a Alemania, donde tiene que incorporarse a la concentración con su selección. El pie no está demasiado hinchado y las molestias que tiene son las propias de cualquier futbolista profesional después de un partido. Pero todo se complica esa misma noche. En la madrugada del domingo al lunes el dolor empieza a agudizarse y el pie, ahora sí, se ha inflamado mucho.
Desde ese instante Kroos se pone en contacto con el doctor Jesus Olmo, jefe de los servicios médicos del Real Madrid, y los médicos de la Federación Alemana de Fútbol. Desde el lunes Olmo ha dirigido y supervisado todas las pruebas que se le han realizado al centrocampista tanto en Colonia como en Múnich.
Analizados los resultados de las pruebas médicas, Kroos habla con Zidane. Entre los dos deben decidir, siempre con el visto bueno de los servicios médicos del Real Madrid, si Toni regresa ya mismo a la capital de España o se queda en Alemania, ya que los 10 primeros días de esta fractura en el quinto metatarsiano el protocolo exige inmovilización. Kroos tendrá que llevar durante ese tiempo una bota de yeso.
La buena noticia para Kroos, para Zidane y para el Real Madrid es que este tipo de fractura no requiere de intervención quirúrgica, por lo que el mediocentro alemán será sometido a un tratamiento conservador que le tendrá entre 6 y 7 semanas de baja. Si todo va según lo previsto, Kroos podrá reaparecer justo después del parón navideño.
Sin duda el mejor regalo de Reyes para el madridismo.