Susto en Lisboa
El Atlético de Madrid cayó derrotado por 1-0 frente al Sporting, pero la victoria por 2-0 en el Metropolitano permite a los de Simeone estar en las semifinales de la Europa League. El conjunto rojiblanco firmó un mal partido, pero no sucumbieron ante el susto de los lisboetas –mucho mejores y más profundos en la primera mitad–.
Como viene siendo habitual, el Cholo Simeone tenía pocas opciones para confeccionar un once que viene marcado por las salidas al fútbol chino en el mes de febrero. La presencia de Oblak es indudable. Juanfran, Savic, Godín y Lucas formaron la defensa, mientras que en la medular les tocó jugar a Gabi, Saúl, Koke y Vitolo. Una vez más, la responsabilidad de ataque recaería sobre Diego Costa y Antoine Griezmann.
La semana europea comenzaba con sorpresas. Grandes sorpresas. La Roma sorprendió al Barcelona y la Juve casi hace lo propio con el Real Madrid. Con la lección aprendida sobre el papel llegaron los del Cholo Simeone a Lisboa, pero otra cosa es cuando la pelota echa a rodar. Bajo el diluvio universal comenzó a apretar un Sporting que quería emular la gesta del conjunto romano, mientras que el el Atlético debería haberse limitado a hacer un fútbol pragmático gracias a la ventaja que llevaban de Madrid.
Avisó Acuña con un remate al segundo palo después de un centro similar a los que hizo la Juventus en el Santiago Bernabéu. Después se erigió la figura de Oblak, que voló como Superman para meter una mano impresionante ante el testarazo de Coates. Pero tanto va el cántaro a la fuente que termina rompiéndose. Los lisboetas se adelantarían con un gol de cabeza de Montero, que aprovechó, libre de marca, un despeje flojito del esloveno. Algún error tendría que permitirse el chico.
El camino de esperanza que había abierto la Roma hace dos días lo había cogido el Sporting. Posiblemente, también porque el presidente puso a los jugadores en su sitio después de la derrota por 2-0 en el Metropolitano. Parecía un equipo nuevo, con garra, actitud y creyéndoselo. Cada llegada rojiblanca era similar: caer en la trampa del fuera de juego de los lisboetas. Mientras tanto, los verdiblancos seguían intentándolo a pesar del revés de la lesión que obligó a Mathieu ser sustituido.
Sufrimiento hasta el final
Así se llegó al descanso, momento en el que las molestias que sufría Lucas Hernández no permitieron continuar al futbolista francés. Vrsaljko entró en su lugar. Saltó mejor en el segundo acto el Atlético, pero los enanos no le dejaron de crecer. Como si un tuerto les hubiera mirado, Diego Costa también se lesionaba y llegaba el momento para el hombre de la semana: Fernando Torres.
Cesó la lluvia y el Atlético parecía más el Atlético. Sin gozar de grandes ocasiones, los del Cholo resurgieron después de una primera parte lamentable. Comenzaba a costarle a los pupilos de Jorge Jesús llegar a la meta de Jan Oblak, pero Montero y Fernandes seguían haciendo que el guardameta esloveno tuviera trabajo.
Tocaba sufrir, sufrir y volver a sufrir. Con el 1-0 en el luminoso, para los rojiblancos el tiempo iba más lento que el caballo del malo. El tiempo no se paraba, pero el corazón de los aficionados del Atlético de Madrid sí que se detuvo en un par de ocasiones prácticamente seguidas después de que Antoine Griezmann errara dos mano a mano con Rui Patricio que bien podían haber sido decisivos para imponer la tranquilidad en las filas colchoneras.
Tras esto, poco más. El Atlético supo sufrir y superó el susto que dio el Sporting con el único gol del partido. Los de Simeone se plantan en las semifinales de la Europa League pese a caer derrotados por 1-0, dejando intacto el sueño de Fernando Torres, sigue vivo para abandonar el club de su vida con un título.