La penúltima vida del gato Benzema

Karim Benzema afronta el último mes de competición con el objetivo de cambiar los pitos del Bernabéu por aplausos. El delantero está firmando una de sus peores temporadas desde que llegara a Chamartín allá por el verano de 2009, con 17 goles en lo que va de curso, encarrilando una sequía de cara a puerta que dura ya un mes. Sólo un gol en un cargado mes de abril, en el que el conjunto blanco disputó un total de nueve partidos. Cierto es que Benzema no jugó tres de ellos, pero para encontrar el último gol del francés hay que remontarse al 2 de abril, frente al Alavés en la victoria madridista por 3-0.

Sin embargo, tendrá la oportunidad de redimirse ante el Atlético de su mal momento de cara al gol. Aunque el escenario no es el ideal. Con Morata en racha y habiendo superado los números del francés en lo que va de campaña -18 goles del madrileño por 17 de Benzema-, jugando mucho menos que él, no son pocas las voces críticas que discuten el empeño de Zidane en seguir dándole preferencia a su compatriota.

Tras quedarse a cero ante el conjunto rojiblanco en el último derbi, frente al Barça, Valencia y en el cruce de cuartos ante el Bayern, el delantero necesita salvar una de sus últimas vidas. No lo tendrá nada fácil, y es que sus números en las rondas finales de la Liga de Campeones no son nada halagüeños. Dos goles en las siete eliminatorias que ha disputado el Real Madrid en los últimos siete años, uno ante el Dortmund en la 2012-13 y otro en las semis frente al Bayern la siguiente campaña, un tanto que dio la ventaja a los blancos en la eliminatoria al ganar en el Bernabéu 1-0.

Así las cosas, Benzema está ante su gran reto. Tras no cuajar una gran temporada de cara al gol y con Cristiano en el mejor momento de forma del curso y en racha, tras haber alcanzado los cien goles en Europa, el punta francés tiene la necesidad de volver a ser el mejor socio para el astro portugués y así calmar los ánimos de la parroquia madridista que, una vez más, se ha vuelto a hartar de él.