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Marlaska disfruta de un palco VIP en la final de Wimbledon con Torre Pacheco convertido en un polvorín

Marlaska abandonó sus obligaciones como ministro de Interior para irse al tenis

Felipe VI encabeza los VIPs de Wimbledon: nadie se quiso perder la final entre Alcaraz y Sinner

  • Francisco Rabadán
  • Redactor jefe de deportes. He tenido la oportunidad de cubrir dos Juegos Olímpicos, varios Mundiales de distintas disciplinas y algún que otro All-Star de la NBA con los Gasol. De Córdoba y sin acento.

Fernando Grande-Marlaska es un fanático del tenis y siempre que puede se escapa a disfrutar del deporte de la raqueta. El ministro del Interior del Gobierno de Pedro Sánchez, sin embargo, eligió un momento poco adecuado para aparecer por el palco VIP de Wimbledon en la final que midió a Jannik Sinner y Carlos Alcaraz. La localidad de Torre Pacheco vive unos días críticos y el ministro quizá debería estar prestando atención a ese escenario y no al tenis.

De hecho, por jerarquía, quien debería estar en Wimbledon es la ministra de Deportes y Portavoz del Gobierno Pilar Alegría, quien no apareció por Londres. La aragonesa envió como representante al presidente del Consejo Superior de Deportes, José Manuel Rodríguez-Uribes, en un claro gesto de que el deporte es una cuestión secundaria en su cartera.

Volviendo a Marlaska, el ministro del Interior de España estuvo apagado o fuera de cobertura durante más de las tres horas que duró el partido. El representante del sanchismo en el palco no dudó en ponerse a la misma altura que el Rey Felipe VI con el que compartió butaca y escasos huecos de la Familia Real Británica representada por Kate Middleton.

No es la primera vez que el ministro Marlaska se desentiende de una situación de gravedad por irse a disfrutar. En octubre de 2019, mientras Barcelona ardía por los graves disturbios provocados por los denominados Comités de Defensa de la República (CDR), Marlaska se fue a cenar a uno de sus lugares favoritos, Válgame Dios, un bar de copas de moda en el barrio de Chueca (Madrid).

Marlaska, señalado por los suyos

Los policías nacionales y los guardias civiles han estallado contra la falta de previsión del Ministerio del Interior de Fernando Grande-Marlaska ante las revueltas en Torre Pacheco (Murcia) por la salvaje paliza a un anciano del pueblo. A ojos de estas entidades, el estallido de la violencia era «perfectamente previsible» y advierte que los agentes no pueden hacer frente a esos disturbios «con medios demasiado ajustados y sin refuerzo».

La asociación profesional Independientes de la Guardia Civil (ICG) ha defendido la necesidad de reforzar las plantillas de la Benemérita de forma permanente en el municipio para proteger a sus habitantes. Daniel Fernández, portavoz de IGC, ha asegurado que los enfrentamientos entre ambos grupos «evidencian la necesidad urgente de dotar de más recursos humanos y operativos a las unidades desplegadas en la zona».

«Los guardias civiles necesitamos también protección institucional, medios adecuados y respaldo público firme. Sin ello, no hay seguridad ni Estado de Derecho», ha advertido Fernández.

Por su parte, el sindicato de Policía Nacional JUPOL ha denunciado «despliegue por parte de Interior, mejor dicho la falta del mismo, cuando era perfectamente previsible una noche de disturbios, deja muy claro en manos de quién estamos». Marlaska, mientras tanto, en la final de Wimbledon.