Lenglet, llueve sobre mojado
El nuevo error del defensa francés, que vuelve a costar puntos, le sitúa de nuevo en la picota
En 43 partidos con el Atlético lleva cuatro penaltis y ya ha visto dos tarjetas rojas
Carlos Bucero, que le ha firmado contrato hasta 2028, es uno de los principales señalados


Cuatro penaltis y dos tarjetas rojas en 43 partidos oficiales jugados con el Atlético. El episodio de ayer en Balaídos no es una anomalía. Clement Lenglet sale en todas las fotos y sus errores y/o falta de concentración le cuestan puntos dolorosos a su equipo. El defensa central francés volvió a quedar muy señalado, pero también está en la diana el director de fútbol Carlos Bucero, que fue quien le firmó contrato el pasado verano hasta 2028, una decisión que fue duramente criticada por la afición desde que se hizo oficial, y que desde luego ahora se delata como altamente equivocada.
Clément Lenglet firma hasta 2028 🔴⚪ pic.twitter.com/222J6R2K5C
— Atlético de Madrid (@Atleti) June 9, 2025
Lenglet es un futbolista con unas condiciones técnicas indudables. Es, de largo, el central con mejor trato de balón de la plantilla. Sin embargo periódicamente parece irse de los partidos y comete errores impropios de alguien de su veteranía. El último fue ayer en Balaídos, al tratar de tirar un caño a Jutglà sin ninguna necesidad y pasándose de frenada inmediatamente después al agarrarle en medio campo para ganarse la segunda tarjeta amarilla y dejar a su equipo con un futbolista menos durante más de una hora.
El problema es que Simeone carece de alternativas válidas en una zona en la que se cansó de pedir refuerzos a gritos el pasado verano. Hancko podría jugar ahí con garantías, pero entonces las carencias se trasladan al lateral izquierdo. Galán le duró ayer 30 minutos en el campo y Ruggeri no jugó ni un solo minuto. La plantilla está descompensadísma en defensa y, hasta el regreso de Giménez -que veremos lo que dura- al Cholo no le queda otra que tirar de Lenglet, aunque desde luego no podrá hacerlo el próximo partido ante Osasuna ya que por lo menos deberá descansar una jornada.
Mientras, el equipo se desangra en defensa sin que aparentemente se tapone le brecha. En ocho jornadas sólo ha dejado la portería cero en un partido, en casa ante el Villarreal, y ya ha desperdiciado cinco ventajas. Así se explica por qué se va al parón a ocho puntos del Real Madrid y a seis del Barcelona.